La llegada del iPhone 4, unida al éxito creciente de los móviles de Motorola, HTC y Samsung equipados con el sistema operativo Android de Google, es una dura competencia para el mayor fabricante de teléfonos mundial, que ha puesto sus esperanzas en el lanzamiento del N8 este otoño.
La compañía sigue siendo líder tanto en el mercado de la telefonía móvil general como en la del negocio de los “smartphones”, aunque es en este último, el más rentable, donde no paran de comerle terreno.
Tres son los grandes errores que ha cometido la empresa finlandesa: el público al que se dirige, el diseño y los acuerdos con las telefonías. Consultores de Neumann International explican que el principal error de Nokia frente a sus competidores es que “mientras el iPhone crea nuevas necesidades en los usuarios, Nokia se ha dedicado a mejorar las capacidades”.Harper&Lynch cree que la finlandesa “no ha sabido llegar a un público objetivo”.
Los expertos citan la llegada del iPhone como el punto de inflexión en el sector. “La aparición del iPhone ha cambiado las reglas no sólo del juego sino del concepto que teníamos hasta ahora de la tecnología móvil”, afirman en Neumann International. La gran jugada de Apple no son sólo sus potentes ventas sino el elevado ingreso por unidad: Mientras Nokia vende 24 millones de terminales e ingresa 143 euros por ‘smartphone’ vendido, Apple vende 8,4 millones e ingresa 400 euros por unidad.
“Mantenemos el 41 por ciento del mercado de ‘smartphones’ pero no tenemos nuestras cabezas dentro de la arena y sabemos que pasamos por un año de transición”, afirman fuentes de la sede central de Nokia en Finlandia. “Nuestra ambición es doble, a partir de nuestra posición número uno en los teléfonos móviles más asequibles, queremos ser líderes en teléfonos inteligentes. El N8 con el sistema operativo de Symbian nos permitirá llegar a ello”, añade la compañía europea.
Muchos apuntan que la compañía debería adaptar Android en sus teléfonos inteligentes en lugar de su propio sistema operativo, Symbian, para recuperar terreno, pero la compañía ha rechazado esa posibilidad. Las tiendas de aplicaciones ligadas a estos sistemas son una nueva fuente de ingresos y Nokia no quiere rendirse tan pronto en este negocio.
Pese a ello, analistas del mercado consideran que Symbian “no está a la altura, porque en todo lo que está siendo clave en el mercado de los móviles, Nokia no está consiguiendo nada”.
Otro de los puntos en que debería mejorar, según indican los expertos, son los acuerdos con las operadoras.
Los expertos apuntan que, pese a que Nokia lo tiene complicado, no todo está perdido para ella.