Siempre que hablamos de la nube es tentador el centramos únicamente en los aspectos tecnológicos y de infraestructura pero a menudo se nos pasa por alto que detrás de ello hay personas. Estas personas han pasado rápidamente de llamarles “los chicos de sistemas” a “ingenieros” y “arquitectos”. El cambio de la nomenclatura habla positivamente de cómo los informáticos han tomado un papel mucho más relevante y prestigioso dentro de las organizaciones. De ser aquellos que se ocultaban cuando se encendía la luz a participar y liderar reuniones estratégicas de negocio. Esto también hace que la ya muy diversificada carrera profesional de informático haya dado un paso adelante y haya generado nuevos campos de especialidad. Algunos ejemplos de estos pueden ser los Business Developers, Sales Engineers o Cloud Architects que en grados elevados de madurez, aún siendo técnicos, rara vez operan.
Algunos ejemplos de estos pueden ser los Business Developers, Sales Engineers o Cloud Architects que en grados elevados de madurez, aún siendo técnicos, rara vez operan
Con la introducción anterior quiero traer el tema central sobre la mesa y es la dificultad de construir un buen equipo técnico, mantenerlo y potenciarlo. Al tratarse de personal altamente cualificado y con habilidades específicas en función de su cometido en ocasiones nos veremos obligados a requerir de la ayuda profesional de head hunters cosa que no debe echarnos para atrás ya que la clave de la contratación siempre es la velocidad.
A la hora de mantener y potenciar al equipo siempre debes saber que lo que pasa en tu equipo es responsabilidad únicamente tuya y que sólo tú puedes cambiarlo. Tengo muy comprobado que tu equipo de trabajo es un reflejo exacto de tus principios, metodologías y actitudes.
- Dar ejemplo es la mejor de las maneras: si llegas pronto a las reuniones todo tu equipo lo empezará a hacer.
- Cuando algo no te guste anúncialo de manera sosegada y contundente al interesado y luego al equipo dejando constancia de que eso no es lo que se espera de ellos.
- Hacer el trabajo divertido y fácil de llevar siempre que se pueda para que cuando no se pueda se tenga una sensación puntual de estrés en la que descubrir los verdaderos caracteres del equipo.
- Ofrece nuevas responsabilidades sólo a aquellos que demuestran por iniciativa propia la capacidad de llevarlas a cabo, los voluntarios y los que lo llevan a cabo con gusto y orgullo.
- La meritocracia y el data driven deben ser las únicas herramientas para medir el desempeño, cualquier otro criterio no sólo es falso sino que pone en peligro todos y cada uno de los aspectos que rodean a los trabajadores.
- Alégrate de aquellos que abandonan la compañía pues llevan tus enseñanzas y cultura fuera de ella lo que fomentará en el futuro las sinergias y cooperaciones.
- La estabilidad y el inmovilismo son espejismos: prepárate siempre para el siguiente cambio, sustitución, reorganización, etc. Cada 6 meses ocurre algo en el mercado o en tu empresa que hace que todo deba replantearse.
Como conclusión quiero hacer entender que la tecnología no es nada sin las personas que hay detrás y que nunca deberíamos perder de vista que el modelo de mercado actual requiere de un constante trabajo de optimización, mejora y comparación con los competidores. No malgastemos el tiempo de nuestros compañeros en funciones de poco valor y protejámosles para que puedan centrarse en duplicar los ingresos de la organización, simplificar los procesos y mejorar día a día.
