El grupo Samsung Electronics alcanzó un beneficio neto de 10,79 billones de won (7.900 millones de euros) en el ejercicio 2004, un 81 por ciento más que en mismo periodo del año anterior. Igualmente, sus ganancias superaron los 10.000 millones de dólares, todo un record en los 35 años de historia de la surcoreana.
La compañía, que registró una cifra de negocio de 57,63 billones de won (42.200 millones de euros), un 32 por ciento más, vio como el beneficio neto de su último trimestre caía casi un 2 por ciento, hasta 1,83 billones de won (1.340 millones de euros). Dicha reducción responde a la caída de los márgenes de sus terminales de telefonía móvil y la de los precios de las pantallas de cristal líquido (LCD).
En cualquier caso, Samsung planea aumentar sus inversiones en un 34 por ciento, hasta 7.500 millones de euros, para mejorar las plantas de producción de LCD y chips, aumentando así sus ventas un 2 por ciento en 2005, hasta 58,70 billones de won (42.851 millones de euros). El vicepresidente Chu Woosik subrayó que la apreciación del won, el incremento de los precios del petróleo y la dificultad en obtener materias primas han provocado un entorno de negocios especialmente difícil en 2004, pero destacó que la demanda mundial de semiconductores mejorará en el primer trimestre.
Las ventas de la división de semiconductores se incrementaron un 43 por ciento, hasta los 18,22 billones de won (13.340 millones de euros), mientras que la de pantallas planas subieron un 67 por ciento, hasta los 8,69 billones de won (6.360 millones de euros). La comercialización de teléfonos móviles también creció un 33 por ciento, hasta 18,8 billones de won (13.800 millones de euros).