Por encima incluso de las novedades técnicas del sistema operativo, que superan las 600 innovaciones, destacan sobremanera dos puntos: su bajada a las arquitecturas x86 de 64-bits además de SPARC- y su nueva política de precios.
Su descenso a los entornos Intel Xeon y Opteron de 64-bits le enfrentan directamente con Red Hat. Desde la óptica de Sun, esta distribución de Linux ha traicionado los principios básicos del software libre. En palabras de Manuel Martínez, director de Marketing de Software en Sun, “Red Hat se está convirtiendo en el Microsoft del futuro, atrapando al cliente con software cada vez más propietario”.
En cuanto a la política de precios, tal y como avanzábamos en nuestra edición digital, se caracteriza porque la licencia está libre de coste. Así, los ingresos para Sun provendrán fundamentalmente de los servicios de soporte, de manera muy similar al modelo Linux.
Para ello, estos servicios se agrupan en tres paquetes -Básico, Estándar y Premium-, con tarifas anuales por CPU, entendida ésta por el zócalo y no por el núcleo del chip.