Los ingresos del fabricante de chips han entrado en la dinámica de beneficios ya advertida por los fabricantes de chips y de PCs en momentos no tan boyantes. En el tercer trimestre de este ejercicio fiscal, la firma ha logrado elevar su beneficio neto hasta 409 millones de dólares (77.700 millones de pesetas) frente a las pérdidas de 106 millones de dólares (20.000 millones de pesetas) cosechadas en idéntico trimestre del año anterior.
Excluyendo gastos, y el montante económico obtenido de la venta de su negocio de comunicaciones de voz Legerity, AMD ha conseguido unos beneficios operativos de 219 millones de dólares (41.600 millones de pesetas). Y es que las ventas, que se han situado en 1.210 millones de dólares (229.900 millones de dólares), casi se han doblado en relación al ejercicio previo, momento en el que se registraron unas ventas de 662 millones de dólares (125.000 millones de pesetas), debido a la fuerte demanda de procesadores para PCs y dispositivos de memoria flash registrada en el mercado.
Una demanda reciente que ha venido también impulsada por el creciente uso de teléfonos celulares y otros dispositivos provistos de microprocesador, que han permitido doblar las ventas en comparación con el mismo trimestre del ejercicio previo, una tendencia que se espera continúe de cara al cierre del ejercicio.
Para el global del ejercicio, AMD espera vender más de 25 millones de unidades de sus procesadores para PCs, alcanzando quizá los 28 millones de chips.
Jerry Sanders, presidente y CEO de AMD, ha señalado en un mercado marcado por una feroz competencia, AMD ha logrado batir cualquier expectativa tanto a nivel de ventas, con un crecimiento del 50 por ciento, como de unidades, ámbito en el que el crecimiento ha sido del 10 por ciento.
