La utilización de la información fruto de este supuesto espionaje industrial por parte del Gigante Azul, sería eliminar del mercado a Compuware a través de la competencia desleal.
Vista así la situación, Compuware no ha dudado en solicitar indemnizaciones millonarias en concepto de daños y perjuicios ante los tribunales de Detroit, donde se levanta su matriz.
Las acusaciones por parte de los demandantes aluden a un empleo de su información para desarrollar productos a un precio más competitivo, rompiendo con lo establecido hasta la fecha en ese nicho. No hay que olvidar que desde hace unos años, IBM desarrolla su propio software ligado al mundo de las aplicaciones en entorno mainframe, compitiendo directamente con Compuware.
El Gigante Azul ha negado tajantemente los cargos. ¿Hará como Microsoft o HP en otras ocasiones, cortando de raíz el pleito a golpe de talón? El tiempo lo dirá; mientras y calentando el ambiente, ya han salido a la luz memorados de IBM titulados ‘Compuware Killer’.