Ibermática ha reunido a cerca de 500 asistentes durante su III Encuentro Anual sobre Innovación, en el que el presidente de la compañía, José Luis Larrea, ha declarado que la innovación es un concepto abierto que supone una transformación e implica ruptura, que debe ir acompañada de calidad y que sitúa a la persona en el centro de todo proceso innovador. “La innovación surge si hay cooperación y el reto que se presenta es la innovación sostenible en el tiempo, pero a la vez competitiva”, según puntualizaba el directivo.
El tema de estas jornadas Tempus Fugit. En busca del tiempo perdido, ha sido el argumento de Ibermática para analizar la estrecha relación que une al tiempo con los procesos de innovación: “la velocidad a la que recorremos la cadena de valor es importante y por ello es necesario capturar y dominar el tiempo; ello se convierte en uno de los principales desafíos de la innovación”, afirmaba Larrea. De acuerdo a este directivo, el sistema de innovación necesita incorporar el liderazgo, pero también apunta que hay que dejar de lado los prejuicios y hay que tener en cuenta al azar como parte de la innovación, “una ley que todavía no comprendemos, pero está ahí”.
Durante este Encuentro estuvo presente la consejera de Industria del Gobierno Vasco, Ana Aguirre, quien enfatizaba en la economía del conocimiento e innovación, “donde las personas ocupan el centro de la escena y se convierten en el activo más importante de la organización”. Aseguraba en esta misma línea que en este tiempo debe existir un nuevo tipo de liderazgo, “donde todos tienen que ser líderes e importantes en una organización ya que los ejecutivos ya entienden a las personas como el activo más importante para alcanzar sus objetivos”. Aguirre sostenía que las organizaciones basadas en estructuras jerárquicas, donde impera el temor, serán a largo plazo ineficientes y estarán condenadas al fracaso.
El evento puesto en marcha por Ibermática fue clausurado por el lehendakari Juan José Ibarretxe, para quien “la innovación y el progreso son necesarios en la sostenibilidad”. También añadía que es necesario desarrollar innovaciones radicales y destacaba los avances que se han producido en ciencia y tecnología, pero matizando que “se deberían haber sabido mantener nuestros sistemas de inteligencia para prevenir los cambios”. Otro apunte del lehendakari es que el sistema económico “ha preferido vivir en la ficción de la locomoción, donde el tiempo no cuenta y todo tiene vuelta atrás, frente a la evolución”. Juan José Ibarretxe ha recordado asimismo el compromiso de la clase política para preparar el futuro; al respecto indicaba que “el Ejecutivo vasco está trabajando en esa línea, que pasa desde la investigación de las energías renovables hasta el desarrollo de la eco-innovación”.