Intel ha creado un fondo que, dotado con un presupuesto de 200 millones de dólares, ha sido concebido como vía de inversión en compañías nuevas centradas en el desarrollo de tecnología digital de ocio para los hogares que, eventualmente, pueda estar al alcance de prácticamente todos los domicilios estadounidenses.
Con esta iniciativa el fabricante pretende apoyar el desarrollo de redes digitales de ocio en los domicilios utilizadas para conectar dispositivos digitales como sistemas de estéreo, reproductores portátiles de música, pantallas planas de televisión y ordenadores personales, y permitirles compartir y transferir vídeo, música e información de una habitación a otra.
De esta forma, Intel contribuye al desarrollo de los denominados hogares digitales, ámbito en el que está impulsando sus procesadores.