La firma japonesa ha puesto en marcha un concurso con el fin de localizar la copiadora o impresora Kyocera más antigua de Europa y que todavía se mantenga en funcionamiento. El plazo finaliza el próximo 30 de noviembre y puede participar cualquier empresa que disponga de un equipo tanto de la marca Kyocera como Mita, con la única condición de poder probar que todavía se utiliza en el entorno de trabajo.
Para ello hay que entrar a la web www.Kyoceramita.es y rellenar el formulario con los datos solicitados, especificando el modelo y número de serie. Habrá cinco finalistas con un premio correspondiente. El ganador será invitado a una fiesta japonesa (hasta 50 personas) y el equipo viajará a Alemania donde será expuesto. A cambio, el galardonado recibirá una impresora de última generación. Con este concurso, la multinacional asiática quiere dejar patente la robustez de sus máquinas. “La dureza y fiabilidad de nuestra tecnología ha sido siempre uno de nuestros mayores valores. Lo demostramos día a día pero queríamos un auténtico reto que además involucrara a todos nuestros partners y clientes. De este modo se nos ocurrió poner en marcha esta iniciativa”, señaló Nelia Moreno, directora de marketing operativo de Kyocera.
En paralelo, la tecnología ECOSYS de Kyocera acaba de cumplir 15 años “logrando los costes de impresión más bajos del mercado y una mayor protección del medio ambiente”, matizó Nelia Moreno. Las investigaciones indican que dos tercios del coste de la vida de una impresora o sistema multifuncional son gastos de funcionamiento. Según la responsable de marketing, “la tecnología ECOSYS reduce notablemente estos costes, equipando nuestros productos con componentes de larga duración que aseguran una mayor fiabilidad y ciclos de mantenimiento mucho más duraderos que cualquier material convencional”.