La innovación constituye un asunto prioritario para las empresas y así lo confirman los resultados del estudio EXP que anualmente realiza Gartner. Según el trabajo de la consultora, basado en entrevistas con más de 600 directores de sistemas, aunque las presiones presupuestarias siguen siendo el factor de mayor influencia en la toma de decisiones, el lanzamiento de nuevas ideas al mercado con mayor rapidez que los competidores es un aspecto cada vez más importante que ha pasado del quinto a tercer puesto en el listado de prioridades.
La consultora considera que esta situación marca un cambio de visión que impulsará el establecimiento de las denominadas empresas en tiempo real, en las cuales el valor de las TIC se miden no son por el ahorro de costes que facilitan sino por la rapidez que facilitan a la hora de detectar acontecimientos críticos con anticipación de forma que es posible responder de manera inmediata.
La competitividad depende cada vez más de la habilidad para identificar eventos críticos con anticipación y para responder a ellos más rápidamente, afirma el director de la investigación, Mark Raskino, quien señala que los mejores responsables de la dirección informática apreciarán su papel como sensores anticipados del cambio que posibiliten una rápida reacción por parte de la empresa.
El control de los costes y la seguridad de los datos vuelven a ser este año los asuntos de mayor prioridad, pero según el analista solo enmascaran un cambio clave que va más allá de la superficie. Los responsables de la dirección informática tienen que impulsar la transformación de sus empresas en organizaciones en tiempo real a través, por ejemplo, de la reducción del tiempo del ciclo de desarrollo de nuevos productos, aconseja Raskino, quien entiende que este cambio requiere un pensamiento más estratégico y la habilidad para adoptar la serie de tecnologías colaborativas que permiten a la empresa competir de forma efectiva, sea por el capital intelectual, el capital financiero o el mercado.
Sin embargo y a pesar de que parece existir un consenso generalizado en cuanto al carácter imperativo de esta evolución, el trabajo de Gartner revela un cierto escepticismo entre los responsables de la dirección informática respecto a la habilidad de sus empresas para adaptarse a ese cambio; alrededor del 55 por ciento de los entrevistado cree que será imposible transformar la mayoría de sus procesos o sistemas en un modelo en tiempo real en un periodo inferior a una década y el 57 por ciento admite que si sus compañías no pueden cambiar serán vulnerables a los competidores de reciente creación que puede ser más rápidos y hábiles a la hora de llegar al mercado.
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