El trabajo que bajo la etiqueta de ‘green computing’ están realizando la práctica totalidad de los fabricantes TI para concienciar de la importancia de reducir el consumo energético puede calificarse de urgente a la vista de los datos que recientemente ha hecho públicos IBM.
De acuerdo con informe, elaborado por Economist Intelligence Unit con el patrocinio del Gigante Azul, el 42 por ciento de los responsables de TI a nivel mundial desconoce el gasto energético que supone su infraestructura tecnológica y, de hecho, sus empresas no realizan seguimiento alguno de ese gasto.
El dato es preocupante teniendo en cuenta que el consumo de energía está llamado a convertirse, y tendría que serlo ya, en una de las principales preocupaciones empresariales debido tanto al aumento de los costes energéticos y a la potencial llegada de una regulación más estricta al respecto, como al creciente demanda de potencia de cara a mantener la operativa de los sistemas TI.
El pronóstico es a todas luces acertado si se considera, como pone de relieve el informe, que uno de cuatro responsable de TI (24 por ciento) en empresas que sí controlan el gasto energético de su plataforma TI aseguran que ese consumo se ha incrementado en los últimos dos años.
