Ecos del pasado

Nuevos destellos han vuelto a aclarar aún con más fuerza el panorama de las tecnologías en los últimos meses, proclive como ha estado en la época más reciente a continuos vaivenes y lejos de emprender pasos sólidos al frente. Un MWC más activo que nunca -más de 100.000 visitantes han atravesado sus puertas este año- ha refrendado esta tendencia positivista y llena de novedades. Los proveedores han echado el resto y la inteligencia artificial, el machine learning, IoT y la analítica se han subido al estrado del éxito como profetas a seguir. Esta buenaventura es la que también ha venido a respaldar los mensajes de las tecnológicas, que han calado en proyectos cada vez más innovadores y disruptivos para las organizaciones. El Ranking que publica Computing ilustra un mercado que parece revivir tiempos pasados; la referencia sobre las cien primeras firmas muestra un crecimiento cercano a los dos dígitos -del 9,1%-, después de aumentar sus números en torno al 5% en los últimos tres años y mantenerse casi plano en ejercicios previos. El empleo lo hace incluso con un porcentaje mayor con la salvedad de que, paradójicamente, es el talento uno de los caballos de batalla que tienen las empresas para poder mejorar los servicios que prestan a sus clientes. Con esta irrupción tecnológica, la capacitación digital de los trabajadores y, no hay que olvidarlo, el empuje proveniente de la administración, todo hace indicar que volveremos a escuchar los ecos del pasado.