Toshiba ha decidido integrar sus divisiones de informática y electrónica de consumo y ha decidido que sea la filial española la que ponga en marcha este proyecto piloto, que se extenderá al resto de la organización dependiendo del éxito del mismo. La decisión de la compañía, en palabras de Javier Pascual, presidente de Toshiba España, se debe a que “los usuarios demandan tecnologías que converjan y con este paso veremos en un futuro los productos interrelacionados”.
La convergencia que inicia Toshiba incluye su negocio de informática con la electrónica de consumo, donde se incluyen televisores ultraplanos LCD-TFT, de plasma, retroproyectores, DVDs y videoproyectores. Este proceso afectará tanto al ámbito tecnológico y de producto, como al canal de distribución y los clientes y funciones de uso. El objetivo, de acuerdo a Toshiba, es conseguir asimismo una reducción de costes que impactará de forma positiva en el negocio.
Por otro lado, Toshiba ha cerrado el primer semestre fiscal (abril-septiembre de 2005) con una facturación de 102,8 millones de euros -un crecimiento del 22,5 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior- y unas ventas de portátiles de cerca de 109.000 equipos, lo que representa una subida del 39,3 por ciento.