Liferay, diseñadora de portales web basados en open source, está en un momento dulce de crecimiento. El pasado año creció por encima del 30% y en 2016 espera seguir manteniendo este mismo ritmo. Este es un año crucial para la firma que fundó Brian Cheung y que pelea con los grandes como Oracle o IBM en el segmento de los portales corporativos. Para el segundo trimestre está previsto el lanzamiento de Liferay 7, su plataforma estrella con la que liderar la transformación digital de las empresas.
Esta progresión, y el hecho de que España sea el centro de ingeniería y desarrollo que Liferay tiene en Europa, ha hecho que invierta un millón de euros en una nueva oficina de 2.000 metros cuadrados que incorpora un concepto totalmente abierto, con espacios destinados a fomentar la creatividad y el trabajo en equipo. Este centro está inspirado en la central de Los Angeles de Liferay y en Google, entre otros. Acoge a 55 personas y tiene un aforo para una plantilla de 140, que es la cifra que esperan alcanzar en tres años.
Carolina Moreno, directora general de Liferay para España y Portugal, lo explica así: “Nuestro objetivo, con el cambio de sede, se ha centrado en crear un entorno de trabajo flexible, amplio y polivalente, adecuado para promover la colaboración y la comunicación corporativa, pero también para fomentar la innovación y potenciar el ecosistema tecnológico de nuestro mercado”.
Las nuevas instalaciones son también el nuevo espacio de trabajo del Centro de Ingeniería que Liferay tiene en Madrid, que es el referente principal del desarrollo de producto en Europa y donde trabajan actualmente un numeroso grupo de ingenieros. El equipo, dirigido por Jorge Ferrer, vicepresidente de ingeniería de la multinacional, es un elemento clave para la firma a nivel mundial, y sus ingenieros –en su mayor parte de nacionalidad española- tienen un papel protagonista en la evolución técnica del producto.
Ágora, punto de encuentro
La nueva sede de Liferay nace también como punto de encuentro, espacio de innovación y de diálogo tecnológico para la propia comunidad Liferay –que en la actualidad supera los 100.000 usuarios registrados (de ellos, cerca de 8.000 en España)-, aunque también será un espacio abierto a la participación de la comunidad tecnológica, en el que realizar conferencias, cursos, debates y otras actividades relacionadas con la innovación en el mundo del software. Para acoger este tipo de actividades, Liferay ha dispuesto un escenario singular, el ágora, con capacidad para 60 personas y con un diseño estético inspirado en los antiguos foros.
Hace pocos días, aprovechando la presencia de los miembros de la OSGI Alliance (Open Services Gateway Initiative) en Madrid, el ágora acogía su primera reunión, la del Java User Group de Madrid (MadridJUG), a la que asistieron más de 50 personas. “Es un placer acoger en nuestras dependencias iniciativas de este tipo, donde diferentes grupos tecnológicos se reúnan a compartir ideas, debatir o buscar vías de colaboración que potencien la innovación tecnológica. Es un objetivo totalmente alineado con nuestros valores de empresa”, destaca Moreno.
