Semanas después de esta operación, la firma anunciaba la llegada, procedente de BMC Software, de Jorge Dinarés, quien ocupa desde junio el cargo de CEO de la empresa. De forma paralela, se ha producido la incorporación de nuevos socios al proyecto: HarbourVest Partners y Atlantic Bridge Ventures, que forman parte del consejo de administración de Panda.
Jorge Dinarés comenta que “hacía falta un cambio que requería una fuerte inversión, con una nueva imagen de marca porque hay una nueva Panda”. Añade que “no hay que olvidar que Panda es una compañía de éxito, la primera de software a nivel nacional y la cuarta anti-malware en el mundo en el ámbito corporativo”.
A partir de este punto, la nueva Panda Security apunta a un cambio estratégico en el que toma cuerpo la gran cuenta. “Queremos ir al mundo corporativo dando imagen de mayor solidez, con una estructura mejorada y un canal que ayude a aumentar la presencia en la gran cuenta”, tal como explica Dinarés.
Pero la empresa quiere además apuntalar su crecimiento en torno a un proceso de expansión internacional, “donde Estados Unidos es clave e invertiremos para incrementar nuestra cuota de mercado”. Panda Security no deja de lado la posibilidad de realizar nuevas adquisiciones para tener presencia en aquellos nichos en los que no está presente, aunque sin dejar de lado los nuevos desarrollos.
El objetivo es incrementar su negocio en un 20 por ciento anual en una primera fase de crecimiento (actualmente supera los 100 millones de euros). De acuerdo con Jorge Dinarés, Panda pretende distinguirse del resto “por su innovación,
tecnología y por la confianza de los clientes” -la empresa cuenta con más de dos millones y medio de usuarios de 150 países-.
Pero a su vez, el directivo plantea una línea estratégica que fomente la vocación de servicio en el entorno de seguridad, “asociando la nueva imagen con el de una empresa que ofrece seguridad, confianza y tranquilidad”. Por otro lado, la compañía pondrá a disposición de sus clientes el concepto Panda 2.0. para ampliar la automatización de procesos y ampliar sus capacidades anti-malware, tanto en el ámbito de la seguridad residente en el PC como con relación al proceso de malware en entornos de red.




