Aunque Lawrie, que tomó las riendas de la compañía sucediendo al propio fundador Thomas Siebel, intentó poner en marcha una estrategia muy centrada en el cliente no ha conseguido frenar la pérdida de cuota frente a competidores como SAP, Salesforce.com, Amdocs y Oracle, reto que ahora queda en mano de George T. Shaheen.
Michael Lawrie, que llegó procedente de IBM, apostó fuerte por la recuperación de Siebel, pero la fuerte competencia en el mundo de las aplicaciones de software ha desbaratado su estrategia.
Incluso como opina Gartner, la lenta pero continua pérdida de posición de Siebel ha hecho a la compañía vulnerable a posibles adquisiciones. “Una fusión o adquisición, aunque no inevitable, sí que es posible”, se argumenta desde Gartner.
A pesar de que Siebel tiene una liquidez considerable, sólidos acuerdos de partners y soluciones aceptables, sin embargo, nadie está libre de este tipo de operaciones, como recientemente ha quedado demostrado con la compra de PeopleSoft por parte de Oracle.




