José Luis Pérez Tejada, Digital Advisor en Penteo, lanzó un mensaje contundente durante su intervención en La Noche del CIO: “La innovación será el motor que impulse la competitividad en los próximos años”. Para el experto, la clave está en “integrar tecnología y negocio como un binomio inseparable”, una visión que coloca al CIO en el centro de la estrategia corporativa.
Según Pérez Tejada, “el CIO ya no puede limitarse a gestionar infraestructuras; debe convertirse en un actor estratégico que traduzca la tecnología en valor real para la organización”. Esta transformación, añadió, “exige visión, capacidad de anticipación y una relación más estrecha con el comité de dirección”.
Perspectivas optimistas
El informe Penteo IT Trends, presentado por Pérez Tejada, dibuja un escenario optimista: “Las perspectivas para 2025 son positivas, con un incremento del 10% en ingresos sobre 2024”. Sin embargo, el reto no es menor.
“Las prioridades para los CIO pasan por mejorar márgenes, buscar nuevas cuotas de mercado y reforzar la estrategia alrededor del dato”, explicó. El dato, insistió, “es el activo que permitirá diferenciarse, pero las iniciativas actuales no cumplen aún las expectativas del mercado, lo que frena la inversión”.
La inteligencia artificial se ha convertido en el gran tema de conversación en los comités de dirección. Pérez Tejada lo resumió así: “La IA se considera estratégica, pero sigue siendo poco presupuestada”, aunque “la inversión crece un 11%”. El experto advirtió que “los comités presionan para su implementación, pero los CIO perciben que las organizaciones no están preparadas”. Las iniciativas más comunes, detalló, son “gestión documental, chatbots, precios dinámicos y reclutamiento”. Para Pérez Tejada, “el reto no es incorporar IA por moda, sino hacerlo con impacto real en negocio y con garantías de escalabilidad”.
La IA se considera estratégica en las empresas, pero sigue siendo poco presupuestada, pese a que la inversión se ha incrementado un 11%
Más allá de la tecnología, el papel del CIO se redefine. “Debe garantizar resiliencia tecnológica, impulsar innovación y alinear la transformación digital con los objetivos de negocio”, afirmó Pérez Tejada.
En su opinión, “la diferencia no estará solo en la tecnología, sino en la capacidad de los equipos para adaptarse y aprender de forma continua”. Por eso, insistió en “la importancia de desarrollar habilidades estratégicas y soft skills que permitan al CIO convertirse en un puente de confianza entre tecnología y negocio”.
El mensaje final del analista es claro: “La innovación será el motor de la competitividad, pero el factor humano constituirá la verdadera ventaja diferencial”. En un entorno donde la IA, el cloud y la analítica avanzan a gran velocidad, “la capacidad de convertir la tecnología en valor tangible marcará la diferencia entre liderar el cambio o quedarse atrás”.
