Mantener activas las redes 2G y 3G, implantadas desde hace más de dos décadas, implica costes elevados y mayor consumo energético, además de restringir la capacidad y la seguridad de las comunicaciones. Por ello, el Ministerio ha iniciado un proceso de participación abierto a operadores, administraciones y otros agentes para recopilar propuestas y organizar una transición ordenada.
El objetivo es que el apagado de estas tecnologías libere espectro radioeléctrico (sobre todo en las bandas de 900 y 2 100 MHz) para reutilizarlo en redes 4G y 5G, lo que mejorará la cobertura y aumentará la velocidad, fiabilidad y eficiencia energética de las comunicaciones.
Índice de temas
¿Cómo se planea el cambio de red?
La consulta servirá para definir calendarios de apagado por operador y tecnología, planes de migración de servicios y dispositivos a 4G y 5G, medidas de comunicación y acompañamiento a los usuarios, así como indicadores para monitorizar el proceso y garantizar la continuidad del servicio de emergencias 112. También se propone crear un grupo de trabajo para coordinar la transición con operadores y colectivos sectoriales, asegurando la protección de los usuarios y la coordinación territorial.
El cuestionario pide información sobre la estrategia de comunicación: plazos de preaviso, canales, mensajes tipo, campañas y atención a clientes. Además, solicita propuestas de medidas para dispositivos y servicios específicos como eCall, alarmas, ascensores o dispositivos de geolocalización, y para colectivos vulnerables como personas mayores o dependientes de teleasistencia, personas con discapacidad o barrera idiomática, y ciudadanos en zonas rurales. Países europeos ya han iniciado procesos similares; España prolongará la consulta hasta el 20 de enero de 2026, y se espera que la transición culmine con una infraestructura digital más moderna, eficiente y sostenible.
El mercado de telecomunicaciones en España
El apagado de las redes 2G y 3G se enmarca en un contexto de modernización del sector y de creciente inversión pública. Según datos de TendersTool, plataforma de inteligencia de mercado especializada en contratación pública TIC, entre enero y septiembre de 2025 se adjudicaron en España más de 3.313 millones de euros en más de 10.000 contratos TIC, y en 2024 se alcanzaron 5741 millones. Estas cifras muestran un impulso sostenido en infraestructuras y servicios tecnológicos orientados a la transición digital.
Además, un informe basado en datos de TendersTool indica que solo en 2024 las administraciones españolas destinaron alrededor de 400 millones de euros a soluciones de computación en la nube para modernizar sus servicios públicos. Las inversiones se concentraron en SaaS (más de 200 millones) y IaaS (unos 150 millones), sectores que modernizan la base tecnológica y la hacen escalable. Buena parte de este esfuerzo se dirigió a sectores críticos como la sanidad, la educación y los servicios sociales. Herramientas como TendersTool permiten seguir estas tendencias gracias a su motor de búsqueda por importe, área tecnológica y territorio, y a sus análisis sobre precios, adjudicatarios y plazos. La información que aportan será fundamental para que empresas y administraciones planifiquen inversiones en redes 4G y 5G.
