La consultora tecnológica SEIDOR presenta las diez tendencias TI que marcarán el rumbo de 2026.
El análisis sitúa la inteligencia artificial como núcleo operativo central de un número creciente de organizaciones y describe cómo esta evolución está acelerando una transformación transversal que alcanza desde la infraestructura y la ciberseguridad hasta los propios modelos de negocio.
Según SEIDOR, 2026 estará marcado por el despliegue gradual de la IA agéntica en entornos reales; el acceso más generalizado a capacidades de cómputo de alta densidad; la consolidación de modelos de gobernanza adaptativa del riesgo; la extensión de enfoques como la arquitectura composable (arquitectura modular basada en piezas que se pueden combinar y sustituir fácilmente) y el GreenOps (gestionar la nube pensando en costes económicos y también en impacto ambiental).
Índice de temas
La consolidación gradual de la IA agéntica
Tras la fase de exploración de 2025, 2026 marca el punto de inflexión hacia la realidad operativa de la IA Agéntica.
La inteligencia artificial evoluciona, pasando de ser una herramienta reactiva (chatbots) a constituirse en sistemas con capacidad proactiva para ‘actuar’ (Agentic AI).
La inteligencia artificial evoluciona, pasando de ser una herramienta reactiva (chatbots) a constituirse en sistemas con capacidad proactiva para ‘actuar’ (Agentic AI)
El matiz clave: la autonomía no será total ni inmediata. Veremos una adopción gradual donde los agentes ganarán independencia en tareas acotadas y repetitivas, mientras que los procesos críticos mantendrán estrictos esquemas de supervisión humana (‘Human-in-the-loop’) para garantizar la responsabilidad y el cumplimiento.
ERP activo: hacia la gestión asistida
El ERP tradicional, entendido como sistema de registro pasivo, evoluciona hacia un modelo de ERP Activo.
Impulsado por la IA Agéntica, el software de gestión reducirá drásticamente la necesidad de input manual en procesos de back-office (tareas administrativas internas y repetitivas).
Desde SEIDOR, en colaboración con los principales proveedores de ERP, ya se están incorporando agentes capaces de detectar anomalías (como una rotura de stock) y proponer o ejecutar acciones correctivas bajo parámetros preaprobados.

El objetivo no es una ‘empresa sin humanos’, sino una organización donde el talento se libera de la gestión transaccional para enfocarse en la toma de decisiones estratégicas y la gestión de excepciones.
Supercomputación y servicios cloud de cómputo masivo
La adopción de la IA evidencia las limitaciones de la infraestructura legacy (sistemas heredados, antiguos, todavía en uso) basada puramente en CPU (procesadores tradicionales, no especializados en cargas intensivas de IA) para las nuevas cargas de trabajo.
Se confirma la transición hacia arquitecturas híbridas con mayor protagonismo de aceleradores (GPU, NPU, LPU).
La modernización de la infraestructura (o su contratación como servicio) se convierte en un requisito innegociable
Para la mayoría de las empresas, esto no implicará construir superordenadores propios, sino gestionar el acceso a servicios cloud de cómputo masivo (centros de datos en la nube con una gran capacidad de procesamiento). La modernización de la infraestructura (o su contratación como servicio) se convierte en un requisito innegociable.
Gobernanza adaptativa y gestión del riesgo (AI TRiSM)
La confianza será en 2026 el ‘gatekeeper‘ absoluto de la adopción de la IA.
Más allá de la velocidad de implementación, el éxito se medirá por la solidez de la estrategia TRiSM (Trust, Risk and Security Management). Las organizaciones avanzarán desde modelos de cumplimiento estáticos hacia una gobernanza dinámica, capaz de monitorizar en tiempo real riesgos como las alucinaciones de la IA o la protección de datos.
Contexto regulatorio: en el entorno europeo, este punto es crítico. Se anticipa una tensión estratégica entre la innovación y el cumplimiento normativo (AI Act, la nueva regulación europea sobre inteligencia artificial).
Ciberseguridad preventiva
La ciberseguridad acelera su transición de un paradigma reactivo a uno preventivo y predictivo. Ante la ‘industrialización‘ de los ciberataques, la respuesta humana manual resulta insuficiente.
La tendencia es la implementación de defensas asistidas por IA que puedan detectar y neutralizar amenazas a ‘velocidad de máquina’.
Gobernanza de datos federada y ecosistemas de agentes
La fragmentación del mercado y las normativas de privacidad impulsan la Gobernanza Federada, que en 2026 se perfila como un modelo de referencia para colaborar con datos de forma segura.

Este enfoque facilita el ‘data sharing‘ (compartir datos entre organizaciones sin perder el control sobre ellos) sin necesidad de centralizar físicamente los activos, respetando la soberanía del dato.
Sobre esta base, emergen arquitecturas orientadas a la orquestación de agentes, lo que desde SEIDOR denominan ‘Agentlakes‘: entornos donde distintos agentes de IA trabajan sobre datos distribuidos de forma coordinada.
IA especializada y de dominio específico
2026 consolidará la convivencia entre los grandes modelos generalistas y la IA vertical basada en modelos más pequeños (SLM: Small Language Models) y eficientes.
Las empresas adoptarán masivamente modelos de dominio específico, perfeccionados mediante técnicas de eficiencia sobre datos propietarios y terminología sectorial (legal, médica, ingeniería).
Hiperautomatización y la evolución hacia ‘service as software’
El modelo de consumo de software continúa su evolución. Más allá del SaaS tradicional, empieza a extenderse un enfoque en el que las empresas no pagan solo por disponer de la herramienta, sino por el resultado automatizado que genera.
Más allá del SaaS tradicional, empieza a extenderse un enfoque en el que las empresas no pagan solo por disponer de la herramienta, sino por el resultado automatizado que genera
Esta evolución se puede describir como una lógica de ‘service as software’, evolucionando desde el ‘pago por usuario’ hacia esquemas orientados al ‘pago por resultado’ en tareas automatizables de alto valor.
Arquitectura composable como habilitador
La adopción de la IA no exige abandonar los sistemas actuales, pero la evolución hacia arquitecturas de mayor modularidad facilita un salto cualitativo: permite diseñar una arquitectura de agents orientada a Business Capabilities que colaboran entre sí.
Para 2026, cobra fuerza la arquitectura componible y modular (basada en Packaged Business Capabilities), donde cada capacidad de negocio se expone como un bloque funcional bien delimitado.
En la práctica, significa construir el sistema en módulos de negocio intercambiables que se conectan entre sí como ‘piezas de LEGO’ tecnológicas.
Sostenibilidad IT: la paradoja de la IA y ‘GreenOps’
La sostenibilidad se refuerza como KPI operativo crítico del CIO (indicador clave para medir el rendimiento de TI), impulsada por regulaciones estrictas y por la propia ‘Paradoja de la IA‘: la tecnología que optimiza la eficiencia corporativa es, a su vez, intensiva en consumo de recursos.
Veremos una adopción madura de prácticas de ‘GreenOps‘ (gestión financiera y ecológica de la nube).
Las empresas deberán equilibrar la innovación con la huella de carbono, haciendo de la eficiencia del hardware una decisión tanto financiera como de responsabilidad corporativa.






