Como ya anunciaba COMPUTING en la pasada edición, la filial española de LambdaNet ha conseguido salir de la situación de suspensión de pagos en la que se encontraba desde hace cinco meses gracias a la puesta en práctica de un plan que le ha llevado tanto a la reestructuración de su red como de su negocio.
En el plano de la infraestructura, LambdaNet ha decidido redimensionar su red, que mantiene alquilada a Renfe, pero reduciendo su presencia hasta 16 ciudades únicamente, cuando anteriormente la capilaridad de la red era mucho mayor.
«Gran parte de la red que se amplió más allá de las 16 ciudades originales, se construyó específicamente para satisfacer las necesidades operativas de Iberbanda. En consecuencia, la reestructuración de LambdaNet España es totalmente razonable desde el punto de vista comercial. No existe razón alguna para administrar y contar con una red cuyos costes de mantenimiento superan a los ingresos que puede generar», explicó Bernie Smedley, CEO de LNG Holdings.
Precisamente, LNG Holdings -propietaria del Grupo LambdaNet en Europa- y Renfe, los principales acreedores de LambdaNet en España, han colaborado con Jaime Martorell, director general de la compañía tras la marcha de Javier López, en la elaboración del plan de reestructuración.
Además, recientemente LambdaNet cerró el conflicto que mantenía con Iberbanda, compañía de LMDS a quien reclamaba el impago de los servicios ofrecidos durante el último año. Desde LambdaNet se apunta que una de las razones que le llevaron a la suspensión de pagos fue la decisión de uno de sus principales clientes en nuestro país, Iberbanda, de reestructurar su red, contratada totalmente a LambdaNet España. Sin embargo, desde Iberbanda se quiere dejar claro que la cobertura de su red se ha ampliado últimamente, pero basándose en la diversificación de proveedores, limitando la infraestructura contratada a LambdaNet pero añadiendo la de otros dos operadores para otros tramos.
