Ambas compañías han suscrito un acuerdo de desarrollo de software en el ámbito de las bases de datos, mercado en el que chocan frontalmente.
Gracias al acuerdo, los desarrolladores de software tendrán la oportunidad de trabajar con las herramientas de Microsoft para escribir programas para las bases de datos Oracle.
El acuerdo supone la integración de los productos de Oracle con Visual Studio .NET 2003, lo que se traducirá en un entorno para el desarrollador mucho más rico.
Este acuerdo se enmarca dentro de la nueva política pacificadora llevada a cabo por el Gigante de Redmond. No hay que olvidar la dura competencia que mantienen en bases de datos ambas compañías. Incluso Oracle es una de las firmas que se encuentran detrás del juicio antimonopolio contra Microsoft en Estados Unidos.




