NetManage, suministrador de soluciones de integración de aplicaciones y e-business, ha puesto en marcha a nivel mundial una nueva estrategia comercial y de servicio que tiene como eje fundamental la oferta de soluciones orientadas a simplificar la transición desde los negocios tradicionales a la nueva economía a través de una red partners. Una serie de socios que, en el caso concreto de España, son Ofitecsi, Afina, Exicom y Getronics.
Con este movimiento, que supone el abandono por parte de la compañía de origen norteamericano de la venta de productos a través de mayoristas, NetManage afronta su incursión en el mercado de las soluciones globales y personalizadas a través de partners. Desde el punto de vista de Hans Joachim Fritsch, vicepresidente europeo de ventas de la empresa, el mercado español es muy importante para NetManage ya que ha experimentado un fuerte crecimiento en los últimos años y del elevado porcentaje de uso de la Red en los negocios. Focalizados en el mercado de la gran cuenta, la compañía, que tradicionalmente ha suministrado soluciones de acceso a host, ofrece ahora un producto que, denominado OnWeb, se contempla como una solución heredada que permite utilizar las aplicaciones host preexistentes en una determinada firma, adaptándolas a los procesos de negocio basados en los modelos e-business más avanzados. Y es que este nuevo desarrollo transforma en cuestión de instantes las aplicaciones host y heredadas en páginas web accesibles mediante el uso de un navegador, lo que supone acercar a las empresas información vital para sus clientes y socios desde cualquier lugar y en cualquier momento.
Alberto Álvarez, director comercial de NetManage en España, afirma que cuando se cumple un año de la instalación de la compañía en España a través de la implantación de una subsidiaria han conseguido estar presentes en las infraestructuras de empresas como Mercedes, Eroski, Alcampo, Mercadona, además de la Comunidad Autónoma de Madrid, y algunas entidades bancarias.
Álvarez aseguró que al cierre de 2000 la filial española había registrado unos ingresos de 1,5 millones de euros (alrededor de 250 millones de pesetas), y que están trabajando para doblar tal cantidad a finales de 2001, con lo que se espera una cifra de negocio cercana a los 375 millones de pesetas.
