Siguiendo las pautas marcadas por la corporación a escala mundial y con el fin de afrontar la actual coyuntura del mercado de las telecomunicaciones, la filial española de la multinacional sueca Ericsson ha puesto en marcha un plan de reajuste de personal, el cual implica el despido de 300 empleados.
Por otra parte, y como parte del proceso de reestructuración iniciado hace tiempo en el área de producción, la compañía ha confirmado que mantiene una serie de negociaciones dirigidas a transferir algunas de sus actuales actividades a otras empresas. Las tres áreas afectadas operaciones, comunicaciones de empresa y soporte informático, dan empleo a alrededor de 550 personas, según fuentes de la propia compañía.
Justificando la decisión de la empresa, Ingemar Naeve, consejero delegado de Ericsson España, ha señalado la actual coyuntura de los negocios en el sector de las telecomunicaciones ha obligado a Ericsson a adecuar su tamaño al del mercado. En paralelo, el directivo ha reconocido debemos continuar el proceso de desverticalización que sigue nuestra industria y que implica la concentración de nuestras empresas en una serie de actividades, consideradas centrales y estratégicas, para ceder el resto de las actividades a compañías especializadas capaces de desarrollar dichos negocios, construyendo así, en torno a nuestra actividad principal, un conjunto de alianzas y colaboraciones que denominamos la empresa extendida.
En relación al mercado de las telecomunicaciones, últimamente en franco declive, Naeve señaló estamos convencidos de que este sector superará en un plazo no excesivamente largo el actual momento de incertidumbre y seguirá siendo uno de los más dinámicos de la economía mundial. Confiamos en que gracias a los cambios estructurales que ahora acometemos, seguiremos siendo una de las compañías en mejor situación para afrontar los retos del futuro.
El directivo se refirió igualmente al compromiso de Ericsson en España, país que según dijo representa uno de nuestros principales mercados, y donde tenemos y seguiremos teniendo una parte importante de nuestros recursos globales, en áreas como I+D, formación o asistencia técnica.
