Desde la perspectiva empresarial, y tras los avatares provocados por la coyuntura económica que condujeron a cerrar el ejercicio pasado en números rojos, la compañía decidió dar un giro para adaptarse mejor a la demanda de los clientes por un lado, y optimizar sus recursos y estructuras internas por otro. Así, la compañía española, miembro del holding internacional con cabecera en Italia, se ha configurado con una dirección general «bicéfala» en la que Ernesto Niethardt, asume las funciones «corporate» y Joe Cisneros, las operaciones para la península ibérica. Sobre ellos, la presidencia recae sobre el presidente del holding Adriano Prefumo. En el año 2000 Dresdner Bank (hoy Allianz) tomó una participación del 31 por ciento en el holding con el fin de sacarlo a bolsa cuando la situación económica lo permita, y mantiene también un puesto en el consejo de dirección.
En ese reordenamiento del negocio el mercado ibérico, junto con el francés, van a ser prioritarios en cuanto a crecimiento para el grupo, limitando los esfuerzos en Latinoamérica (Méjico, Argentina y Chile) al soporte a los clientes existentes.
En cuanto a la oferta de la firma, el nuevo modelo, según explica Joe Cisneros, «exige conocer mucho mejor a nuestros clientes desde el punto de vista de su negocio, de forma que podamos aportarles valor, por encima de la tecnología». Para el ejecutivo, lo importante es identificar las problemáticas complejas dentro de los clientes «que sólo nosotros seamos capaces de solucionar y que impliquen todas o la mayoría de las áreas tecnológicas que soportan los negocios».
El modelo, tal como recoge el cuadro adjunto, tiene como interlocutor al máximo responsable de las compañías clientes, es decir, el responsable de negocio y se basa en la información como elemento vital para la toma de decisiones. Para los interlocutores de Selesta, tres son las preocupaciones principales a las que se pretende dar respuesta desde la globalidad: Seguridad (que la información sea segura, correcta e íntegra), Sistemas (facilidad de acceso, disponibilidad total y rapidez de respuesta) y Aplicaciones (sencillas de manejar y que respondan correctamente a las necesidades del negocio).
En esencia y según Cisneros, se trata de ver, desde el punto de vista del negocio de nuestros clientes, que la informática es una herramienta que nosotros les sintonizados para que funcione mejor y más ajustada a las necesidades concretas de los clientes, no de sus infraestructuras que, por otra parte, deben estar perfectamente alineadas con ese negocio».
Con el fin de adaptarse mejor al nuevo modelo más próximo a los clientes, Selesta, además de redimensionar sus estructuras internas (incluida una reducción de plantilla), también ha reducido drásticamente el número de proveedores estratégicos que representan.
Selesta pone rumbo al negocio de sus clientes
La compañía ha rediseñado sus estructuras para dar una respuesta de negocio, más que tecnológica, a sus clientes.
Publicado el 16 Abr 2003

Temas
Canales



