Toshiba España vendió 177.000 ordenadores portátiles durante el último ejercicio, lo que representa una subida del 24,2 por ciento. Un 77 por ciento de estas ventas corresponden al mercado español, siendo el resto unidades comercializadas en Portugal. En cuanto a la facturación, el negocio de la compañía ha ascendido a 184,4 millones de euros -un 1,6 por ciento más que el ejercicio previo-. De esta cantidad, 161,4 millones de euros provienen del área de informática -con una subida del 2,5 por ciento- y el resto de la actividad en electrónica de consumo.
El 65 por ciento de los portátiles de Toshiba se encuentran en el mercado de consumo y el 35 por ciento en el segmento profesional. Javier Pascual, presidente de la compañía en España, asegura que “se ha detectado en el último año una desaceleración en la bajada, al tiempo que hemos observado que el mercado profesional crece paulatinamente”. En este sentido, la firma muestra su satisfacción con cierta recuperación tras la introducción del concepto Toshiba EasyGuard.
De cara al próximo ejercicio, Toshiba tiene el objetivo de llegar a los 200 millones de euros de facturación con un crecimiento por encima de los dos dígitos. Educación y la Administración Pública serán dos mercados clave para la compañía y a los que dará continuidad en 2005.
