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Importancia de las plataformas digitales en el mercado ferroviario
La liberalización del mercado ferroviario ha traído consigo grandes beneficios para los pasajeros: más operadores, más opciones y mejores precios. Pero en un contexto de transformación acelerada, tanto estructural como digital, el verdadero valor añadido está en la experiencia. Hoy más que nunca, se trata de acompañar al viajero antes, durante y después del trayecto.
Las plataformas digitales juegan un papel clave. Gracias a su capacidad de integración inteligente con múltiples operadores, permiten responder a una demanda creciente de soluciones simples, personalizadas y transparentes. La tecnología ha demostrado ser un punto de encuentro entre datos, contexto y valor añadido, impulsando un ecosistema centrado en las necesidades reales de los usuarios.
La tecnología ha demostrado ser un punto de encuentro entre datos, contexto y valor añadido, impulsando un ecosistema centrado en las necesidades reales de los usuarios
MIKE HYDE,

España, líder en madurez digital
España lidera en madurez digital: el 84 % de los viajeros utiliza aplicaciones de reserva para planificar sus desplazamientos. Esta familiaridad con lo digital genera nuevas expectativas: el usuario quiere herramientas que entiendan sus hábitos, que filtren lo irrelevante y que ofrezcan exactamente lo que necesita, sin fricciones.
Aquí es donde la inteligencia artificial, el machine learning y el uso inteligente de los datos se convierten en aliados esenciales. En este sentido, el 94 % de los viajeros españoles cree que la IA mejorará su experiencia en el tren. Y no es para menos, los avances tecnológicos permiten a las plataformas pasar de simples buscadores a verdaderos asistentes de viaje.
Inteligencia personalizada para cada usuario
En Trainline, esta inteligencia se ha plasmado en motores como el que permite combinar trayectos de forma más relevante y personalizada, aprendiendo de las decisiones de millones de usuarios. Lo importante no es ofrecer todas las opciones, sino las más útiles. La tecnología tiene el potencial de anticiparse a las preferencias individuales, ajustando la búsqueda a factores clave como el precio, la duración o la comodidad.
Los datos lo avalan: un 88 % de los viajeros en España valora positivamente las recomendaciones basadas en hábitos anteriores. Esto es posible gracias a sistemas que entienden el comportamiento humano y generan respuestas personalizadas, sin necesidad de que el usuario lo pida explícitamente.
El valor de la personalización
La personalización aporta mayor valor cuando forma parte de una experiencia fluida de principio a fin. Esto implica integrar todos los aspectos, como calendarios de precios dinámicos, los mapas interactivos de asientos, los paneles de salidas en tiempo real y las alertas personalizadas sobre incidencias en una única plataforma sin fricciones. La tecnología no solo debe adaptarse a las necesidades del viajero, sino también simplificar su viaje en su conjunto.
Todo esto solo es posible gracias a un modelo colaborativo donde plataformas, operadores ferroviarios y administraciones comparten un mismo objetivo: ofrecer al viajero una experiencia integrada, ágil y personalizada.
España ha avanzado de forma notable en este sentido, gracias a una infraestructura moderna y una creciente cooperación entre los distintos actores. La interoperabilidad y el acceso a información en tiempo real no son solo cuestiones técnicas: son los pilares de una movilidad más inteligente. Y aunque aún quedan retos, el camino pasa por reforzar estas sinergias y avanzar hacia un estándar europeo abierto, que derribe barreras digitales y potencie un transporte más conectado y humano.







