El pasado año 2000, definitivamente, ha sido uno de los mejores años de los últimos tiempos para la compañía afincada en el levante español. Global Manufacturers Services había visto años atrás como su cifra de negocio caía inevitablemente, desde los 45.116 millones de pesetas registrados en 1996 a los 35.485 millones de la misma moneda obtenidos al cierre de 1999. El año anterior fue cuando mayor batacazo sufrió, pero la organización ha sabido reponerse y mantener su pica en los puestos de cabeza. De este modo, en 2000, de nuevo bajo la dirección general de Pedro de Castro, la que fuera propiedad de IBM ha subido en su posición dos puestos en el ránking, pasando de la plaza 17 del año pasado a la actual 15; ello ha sido posible a los 49.580 millones de pesetas facturados, lo que supone un crecimiento respecto al año anterior del 39,7 por ciento. Este espectacular incremento le ha posicionado, a su vez, como la cuarta compañía de hardware que más creció al cierre del ejercicio fiscal 2000, por detrás de firmas del calibre de IBM, Hewlett-Packard y Compaq. Además, y lo que al fin y al cabo termina por ser más relevante, sus beneficios netos se situaron en 967 millones de pesetas, que superan a los pasados 956 millones del año pasado. Así pues, el balance no podía haber sido más positivo, respaldado por un crecimiento en plantilla del 18,8 por ciento respecto a 1999 con 827 empleados -a pesar de la escasez de profesionales- y un ratio de facturación por empleado de 60 millones de pesetas. Otros aspectos destacados son su nivel de exportaciones reflejado en 34.494 millones de pesetas y 223 millones dirigidos a I+D.
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