Microsoft acaba de presentar los resultados relativos a su tercer trimestre. En dicho periodo, finalizado el pasado 31 de marzo, la compañía obtuvo un beneficio neto de 1.300 millones de dólares (1.094 millones de euros), lo que representa un descenso del 39 por ciento respecto al mismo periodo del año anterior.
El acuerdo amistoso alcanzado el 1 de abril con Sun Microsystems y la multa impuesta por la Unión Europea a final de marzo han obligado al grupo a contabilizar una provisión neta de 1.890 millones de dólares (1.589 millones de euros).
Asimismo, la cifra de negocio de Microsoft alcanzó entre enero y marzo los 9.180 millones de dólares (7.721 millones de euros), lo que supone un descenso del 17 por ciento respecto a los tres primeros meses del año anterior.
A este respecto, el director financiero del fabricante, John Connors, asegura que los gastos globales de las empresas en TI continuaron mejorando en el primer trimestre de 2004, lo que permite confiar en que se mantenga la demanda hasta finalizar su ejercicio fiscal.




