La situación financiera por la que atraviesa España sigue siendo delicada, motivo por el cual 2011 cerrará con un crecimiento en línea con lo esperado, aunque por debajo de la cifra obtenida en 2010. Efectivamente, según las últimas cifras recogidas en el IV Estudio Anual sobre la implantación de las tecnologías BPM en España elaborado por el Club-BPM, el año pasado la cifra ascendió hasta el 9%, mientras que este año el BPM solamente crecerá el 6,8%.
Sin embargo, las empresas, a pesar del estancamiento económico del país, tienen la esperanza de una recuperación en la segunda mitad del 2012 y, por tanto, están más abiertas a la inversión en soluciones BPM que les permitan ser más competitivas en un mundo global. Así, el indicador de crecimiento en BPM para el 2012, si la economía comienza a repuntar como se espera, alcanzará previsiblemente crecimientos de entre un 7 y un 10%.
Otro aspecto positivo es que España sigue siendo el tercer país de toda Europa, situado por detrás de Alemania e Inglaterra, que avanza a buen ritmo y con firmeza desde hace ya varios años en el ámbito empresarial y en las Administraciones Públicas, en cuanto a la automatización y gestión de procesos se refiere. Así, en cuanto al grado de implantación de soluciones de BPM, un 39,6% de las empresas consultadas dice disponer de algún tipo de solución BPM, fundamentalmente soluciones de análisis, modelización y diseño de procesos y BPM:Workflow. Además, El 36% manifiesta tener un proyecto dentro de los próximos 12 meses.
Confusión
El contrapunto lo pone el alto grado de desconocimiento en torno a las implicaciones de la gestión de procesos de negocio. El problema fundamental es que se tiene la percepción de que la tecnología adquirida en sí misma puede automatizar los procesos de negocio y resolver los problemas empresariales, pero realmente, según alerta el Club-BPM, es sólo un conjunto de piezas de software que no incluyen técnicas, ni metodologías de implementación, ni conocimientos de una gestión transversal de los procesos de negocio de principio a fin y a lo largo de todas las unidades funcionales de la empresa.
El informe señala por tanto que la formación resulta decisiva para solventar este problema. Así, un 87% de las usuarias la considera muy importante para el éxito de la implantación BPM en la empresa.