Con el lanzamiento de Windows 8, Microsoft no solo está anunciando una nueva actualización de su sistema operativo; el verdadero mensaje que quiere transmitir es que está en plena metamorfosis de su visión como compañía para recuperar su imagen de firma sofisticada y mágica. Empezó con el cambio de su logo oficial por primera vez en 25 años, y ahora le sigue las nuevas versiones de Windows para ordenadores, tablets y smartphones; su nueva tablet Surface; un servicio de música y cine; software para la videoconsola Xbox; y una actualización de Skype.
Por eso, Microsoft está asumiendo un gran riesgo con Windows y Office, los dos productos responsables de la mayor parte de sus ingresos y ganancias, para mantener su relevancia en un mundo donde los dispositivos móviles con nuevas experiencias se están convirtiendo en la norma. El problema es que, a pesar de que Windows 8 ya está disponible, la mayoría de las compañías de todo el mundo aún están desplegando Windows 7 y trabajando por eliminar Windows XP ya que su suporte no finaliza hasta abril de 2014.
Windows 8 viene disponible en dos versiones para el cliente final: Windows 8 y Windows 8 Pro; y una versión específica para el entorno empresarial bajo la denominación de Windows 8 Enterprise, que ofrece nuevas capacidades en productividad móvil gracias a características como Windows-To-Go (permite a los departamentos de informática proporcionar a sus empleados una imagen corporativa de Windows en un dispositivo de almacenamiento USB), DirectAcess (facilita a los usuarios remotos un acceso más seguro y sencillo a los recursos de la red corporativa sin tener que iniciar una conexión de red privada virtual (VPN), y Branch Cache (los empleados de diferentes oficinas podrán acceder a la información en los servidores centrales de la empresa sin necesidad de descargarlos localmente).
En paralelo, Microsoft ha presentado un nuevo miembro de la familia Windows diseñado para tablets con procesador ARM, bajo el nombre de Windows RT, una versión que estará disponible y preinstalada en la nueva generación de tablets. Sin embargo, pese a los esfuerzos del gigante del software por cubrir todos los flancos de la movilidad, predice Gartner que Windows 8 pasará a ocupar la tercera posición en el mercado de sistemas operativos por detrás de Google Android y Apple iOS.
No en vano, empresas de todas las industrias ya llevan un tiempo desplegando aplicaciones móviles para entornos tablets, preferentemente iPads, por lo que Microsoft tendrá que hacer un esfuerzo enorme para que Windows 8 gane en popularidad como plataforma móvil. De momento, ha permitido que las tablets que ejecutan el sistema operativo se puedan conectar sin problemas a las herramientas de administración y seguridad de back-end de las compañías.
Con todo, aseguran los expertos que Windows 8 cambiará el sistema operativo que hasta ahora conocemos. Gartner menciona que con su nueva interfaz de usuario y set de API, la nueva versión es el comienzo de la era WinRT y WinNT. “Llevará más de diez años a las empresas completar su transición a la tecnología WinRT, y si tiene éxito representará los siguientes 20 a 30 años de Windows”, destaca la consultora.
Proceso de Actualización
Otra de las prebendas que Microsoft ha ofrecido con el nuevo Windows 8 es que ha simplificado bastante el proceso de actualización a la nueva versión, teniendo en cuenta que ha decidido comercializar dos ediciones de retail. Hasta el 1 de febrero de 2013, se puede migrar vía descarga por Internet de Windows 7, Windows Vista o Windows XP a la edición Windows 8 Pro, con todas sus funcionalidades, por 40 dólares. Asimismo, si se adquiere un PC con Windows 7 Home Basic, Home Premium, Professional, o Ultimate instalado, entre el 2 de junio de 2012 y el 31 de enero de 2013, se podrá obtener un descuento de 15 dólares en la actualización a Windows 8 Pro. El problema es que cuando se compra un PC con Windows 8, este es la versión básica que no incluye opciones de actualización.
