Así lo considera la compañía HR Access, que ha ratificado el crecimiento de este tipo de servicios para su negocio, ya que, ya en los resultados correspondientes a su ejercicio fiscal 2009, el outsourcing representó casi el 15 por ciento de su facturación global, lo que significa un crecimiento del cien por cien con respecto a la cifra registrada en 2008. Y las perspectivas para el 2010 vaticinan un crecimiento muy superior.
“El outsourcing de RRHH se ha convertido en una herramienta estratégica para las empresas e incluye tanto la optimización de las tareas administrativas y de nomina como la externalización tecnológica y aplicativa de áreas de gestión como la gestión del talento, el reclutamiento, la formación o la evaluación de capacidades. Las circunstancias económicas no han hecho más que acelerar el proceso, sobre todo, ahora que las empresa empiezan a darse cuenta de que los proveedores de outsourcing son capaces de aportar valor de negocio a largo plazo”, asegura Pierre Paradis, director general de HR Acces para el Sur de Europa y Latinoamérica. Y es que según datos de la propia compañía, el coste anual de nómina por empleado en las empresas menos eficientes puede llegar a 290 euros, y se reduce hasta alcanzar los 94 euros en las empresas que realizan la gestión más eficiente.
Sólo en recursos dedicados a la gestión de nómina, las empresas alcanzan un 70 por ciento del gasto del departamento de personal. Con un servicio de outsourcing se puede trabajar con la mitad de recursos y de personas y afrontar el triple de funciones, ya que las empresas se pueden ahorrar entre un 20 y 40 por ciento del coste fijo.
Las consultoras también llevan tiempo prediciendo este auge, ya que un estudio de IDC relativo al primer semestre de 2009, confirmaba que el outsourcing fue la única área del mercado de servicios que se mantuvo en cifras positivas con un crecimiento del 4,6 por ciento. Por otra parte, las estimaciones apuntan a que un 25 por ciento de las empresas de entre 500 y 5000 empleados externalizarán la nómina de cara al año 2012, frente al 10 por ciento que hoy por hoy opta por esta vía.