Próxima a cumplir un año de existencia, Atlante, compañía de Internet de Indra, cuenta ya con una plantilla de 281 personas, la mayoría de ellos consultores especializados en los nuevos modelos de negocio y en tecnologías emergentes (Internet móvil, interactividad, banda ancha), creativos o gestores de contenidos.
Y es que la compañía, cuyos responsables aseguran que obtendrá beneficios al cierre de su primer año de actividad, cubre los distintos eslabones de la cadena de valor de los servicios profesionales, aportando soluciones específicas para cada mercado (diseño y lanzamiento de nuevos productos, integración de la cadena de suministro, gestión de clientes o interacción con las redes comerciales). De hecho, la empresa ha desarrollado ya cerca de un centenar de proyectos y cuenta con más de 80 clientes. Constituida en marzo de 2000 con un capital de 9 millones de euros (alrededor de 1.500 millones de pesetas), Atlante aglutina la experiencia de su propietaria en el ámbito de los mercados digitales y es considerada por esta como una de sus principales bazas de crecimiento. En este sentido, decir que Atlante pretende expandirse a corto plazo en los principales mercados internacionales de habla hispana y portuguesa, creando sinergias con la propia Indra.
Desde el punto de vista de Andrés Blanco, director general de Atlante, la nueva economía está pasando de una primera fase de experimentación a una fase de consolidación donde la solidez del modelo de negocio prima sobre cualquier otro aspecto.




