Los actuales controladores para redes inalámbricas que se utilizan para realizar tareas de seguridad, de gestión y de conmutación del tráfico procedente de los puntos de acceso que se le conectan no tienen sentido tal y como están concebidos para los volúmenes de tráfico que entran a día de hoy a través de los puntos de acceso wireless. Así lo explica Salvador Ferrer, director técnico de Enterasys Iberia, al considerar que “las redes se despliegan con las mismas premisas que hace cinco años y eso es un error, dado que antes el controlador Wi-Fi gestionaba y controlaba de 1 a 200 puntos de acceso, cada uno de ellos trabajando a 11 Mbps, sin embargo ahora los access points pueden mover 500 Mbps de tráfico cada uno, lo que hace que un controlador con un enlace de 1 Gbps solo pueda filtrar tráfico a dos puntos de acceso”.
Desde Enterasys abogan por reducir los actuales cuellos de botella en la conmutación de tráfico procedente de redes inalámbricas liberando de esta tarea a los controladores Wi-Fi. “No se trata de eliminar la figura del controlador, sino de reducir sus labores, concretamente la de conmutación del tráfico, de manera que el controlador seguirá realizando la gestión pero la conmutación del tráfico se acometerá desde otros puntos de la red”, aclara Salvador Ferrer.
Esta propuesta de Enterasys permitirá reducir los actuales cuellos de botella provocados por el colapso del controlador Wi-Fi y favorecerá sacarle todo el partido posible a la tecnología Wi-Fi basada en el estándar 802.11n. Este replanteamiento de las funciones de los controladores Wi-Fi pretende acabar con la estrategia actual del mercado de asociar a un mismo dispositivo la oferta de servicios, la gestión y el control de tráfico, “en una red Wi-Fi moderna esta asociación no puede darse”.
Equiparable a una LAN
Las redes inalámbricas deben seguir los pasos que en su día dieron las redes LAN y replantear la función del controlador, que ya no puede ser el elemento central de gestión de tráfico y servicios. La propuesta de Enterasys es una arquitectura de red Wi-Fi donde las funciones de filtrado, conmutación, QoS, y gestión de ancho de banda estén distribuidas de modo que se pueda lograr la escalabilidad óptima que requieren las redes 802.11n. La compañía ofrece una arquitectura Wi-Fi distribuida en la que los mecanismos de filtrado y autenticación avanzados están incorporados en los conmutadores; una arquitectura unificada de servicios LAN/WLAN y esto es posible gracias a la flexibilidad de su arquitectura Wi-Fi. El cliente tan solo tiene que actualizar el software si tiene un contrato de mantenimiento para conseguir esto sin tocar más elementos de la red.
