La multinacional aprovecha la herencia tecnológica de la adquisición de To Tower Technology en 2004, abordando este segmento en el que la competencia directa viene de la mano de actores del calibre de FileNet o Documentum, entre otros.
La premisa en la solución de la multinacional ha sido la orientación al usuario de negocio, lo que significa que todos los workflows se encuentran predefinidos por pasos secuenciales, sin necesidad alguna de programación.
Desde la captura –con integración con OCR/ICR incluida- o la gestión de los casos hasta la conformidad, de acuerdo a las tendencias y normativas vigentes, son cubiertas por la tecnología de Vignette, que no ha descuidado las prestaciones colaborativas en todos los niveles.
La estrategia comercial de la compañía pasa por, en un primer momento, evangelizar con su nueva aproximación aprovechando la base instalada con la que ya cuenta y, por otro lado, ampliar su cartera de clientes a través de una cuidada –y reducida- selección de partners. Esa será su baza, aunque la primera referencia española con la que dispone –dentro de la Administración Pública- la está ejecutando la propia Vignette.





