Los últimos datos proporcionados por las consultoras apuntan que ya hay más móviles en el mundo que PC, que el acceso a la banda ancha móvil va en aumento y que el acceso a Internet es posible desde un número cada vez mayor y variopinto de dispositivos. En definitiva, el negocio de la movilidad ha cogido carrerilla y el sector no quiere perder comba, sobre todo fabricantes y operadores que lanzan al mercado nuevos productos y soluciones capaces de satisfacer las necesidades de un público entregado a la causa.
Ante este alentador panorama, ¿está el canal de distribución preparado para dar respuesta a lo que se les viene encima?, ¿con qué herramientas pueden y deben atender esta demanda para no quedarse fuera de escena? Para debatir sobre estas y otras cuestiones, CHANNEL PARTNER ha organizado un desayuno de trabajo en el que han intervenido diferentes protagonistas de la industria. Como no podía ser de otra manera, el punto de partida de la reunión fue la reciente celebración del Mobile World Congress y todas las novedades y anuncios que tuvieron lugar en este macro evento. Con este hilo argumental de fondo, los contertulios confirmaron el predominio absoluto de las tabletas, el empuje fuerte de Android y el esfuerzo realizado por las compañías implicadas en este negocio a la hora de poner en funcionamiento plataformas viables. Y es que, aunque la brecha la abrió Apple con el lanzamiento del iPad, el resto de actores no han tardado mucho en meterse de lleno en este segmento. Tal ha sido la cantidad de dispositivos de estas características presentados en los últimos meses que, como expuso Guillaume Wiart, mobility sales manager para España de Fujitsu(compañía que empezó a hacer tabletas a principios de los 90), se ha llegado a “horizontalizar” un mercado que era muy vertical.
Sin embargo, la oferta de este tipo de productos de cara al usuario final aún no se ha completado, indicó Guillermo Echeverría, jefe de producto Note PC de Samsung, y será este año cuando el consumidor empiece a tener claro para qué va a usar estos dispositivos, es decir, determine su utilidad. La necesidad ya está creada (la gente quiere un tablet, sabe lo que es, no hay que explicárselo) pero ahora ha llegado el momento de configurar un ecosistema alrededor de estos equipos y de que los software makers y creadores de contenidos cierren el círculo y sepan cómo introducirse en este negocio. Una tarea pendiente, en definitiva, para el canal que todavía se encuentra perdido. Para encontrar ese camino Beatriz Ortega, responsable de smartphones y aplicaciones en la unidad de Empresas de Vodafone, cree que el reto está en desarrollar aplicaciones que mejoren la eficiencia, rentabilidad y productividad de los clientes corporativos y la red de ventas constituye una parte importante a la hora de comercializar dichos aplicativos. Una visión que también compartió Guillaume Wiart, de Fujitsu, al considerar que los partners deben vender un paquete cerrado y seguro, no atendiendo tanto a la tecnología que hay detrás sino al uso que se le va a dar a estas soluciones; de ahí que haya que diferenciar tres mercados: consumo, pymes y gran cuenta pues sus necesidades son distintas. Y es fundamentalmente en el entorno profesional donde queda mucho por hacer ya que se echan en falta aplicaciones de productividad porque los usuarios profesionales más que consumir información demandan herramientas que les ayuden a gestionar la información que generan. En este sentido, Wiart reconoció que a día de hoy existe un problema todavía por resolver al respecto: no hay una estandarización del sistema operativo, aunque parece que es Google (con Android) el que está haciendo la mejor apuesta. Por su parte, Guillermo Echeverría, de Samsung, apuntó que esas aplicaciones profesionales surgirán cuando el usuario esté acostumbrado a estos dispositivos, conozca cómo funcionan y les haya perdido el miedo.
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