El año pasado por estas fechas y en la edición del Anuario 2010 terminé mi tribuna prometiéndoles que este año que estamos a punto de finalizar ya no hablaríamos de crisis, que estaba convencida que sería un 2010 en el que comenzaría la recuperación económica, aunque lentamente se vería creación de empleo y nuestros políticos dejarían de improvisar para actuar con inteligencia y estrategia, pero no saben cómo lamento haberme equivocado.
Terminamos un año complicado donde la rentabilidad de las empresas ha seguido disminuyendo a la vez que los márgenes se estrechan hasta terminar ahogando a muchas compañías. La pequeña y mediana empresa sigue sin ver la luz al final del túnel y el número de desempleados sobrepasa con creces los cuatro millones de personas.
Un panorama un tanto desolador que hace que nuestro tejido empresarial, mayoritariamente pyme, se retraiga a la hora de invertir en tecnologías.
Sin embargo, es ahora más que nunca cuando necesitamos ser eficientes, productivos e innovadores, es en estos momentos cuando tenemos que demostrar nuestra valía tanto personal como profesional, es en tiempos complicados, como los que estamos viviendo, cuando hay que transformarse y diferenciarse del resto aportando valor.
Es en la capacidad que tengan las empresas para innovar, transformarse, adecuarse a las nuevas demandas, al mundo cambiante donde radica su diferenciación y competitividad.
Y para ello hay que ayudarse de las tecnologías; invertir en TIC es invertir en futuro es apostar por caballo ganador.
Pero, ¿cómo y en qué invertir? Las tendencias tecnológicas para los próximos años, según las consultoras Deloitte y Gartner, pasan por el cloud computing que seguirá creciendo tanto para nube pública como privada, las aplicaciones móviles y los tablets, donde Gartner estima que a finales de 2010 cerca de 1.200 millones de personas los utilicen; la comunicación social y el networking, gracias al auge de las redes sociales en el uso personal; además de los tipos de almacenamiento de memoria, la computación ubicua y la fabricación basada en infraestructuras y ordenadores.
Otras de las tendencias, según Deloitte, pasará por centralizar el poder de procesamiento y de almacenamiento en servidores centrales a los que se accede desde ordenadores muy básicos, debido a “la confluencia de prioridades como la reducción de costos, la eficiencia energética, la seguridad y la productividad personal, que impulsará el concepto de cliente ligero”.
De todo ello, COMPUTING les mantendrá puntualmente informado durante el 2011 y usted podrá acceder dicha información en múltiples plataformas; seguiremos con nuestra edición en papel, la web cumplirá su cometido de informarles diariamente de toda la actualidad del sector y también podrá encontrar todos aquellos informes, entrevistas, opiniones que le ayuden a tomar decisiones para su negocio, continuaremos organizando eventos, publicaremos revistas digitales… todo un mundo de posibilidades que sin la ayuda de las Tecnologías de la Información no seríamos capaces de poder atender a sus demandas.
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