Constituida en diciembre de 2012 e impulsada por la Congregación de Esclavas del Sagrado Corazón de Jesús, la Fundación Educativa ACI es una entidad de enseñanza concertada que aglutina a un total de quince colegios distribuidos en diferentes Comunidades Autónomas que cuentan con una amplia trayectoria y experiencia en el mundo de la enseñanza. En esta institución, que emplea a un total de 884 profesores, se forman casi 10.000 alumnos en España.
Uno de sus centros, el Colegio Esclavas SCJ de Santander, ha emprendido un proyecto de innovación tecnológica con el fin de procurar un mejor aprendizaje a sus alumnos, conjugando en todo momento modernidad con los valores y principios sobre los que se asienta la institución.
En su compromiso por ofrecer una educación excelente y adaptada a los nuevos tiempos, la institución debía modernizar su infraestructura de TI y crear un entorno más homogéneo si quería incorporar nuevos desarrollos para mejorar la enseñanza y el acceso a las materias por parte de los alumnos, como es el caso de la utilización de Chromebooks para, de este modo, aportar mayor dinamismo y fluidez a su labor educativa y permanecer a la vanguardia en este ámbito.
El problema que se encontraba el colegio era que, primero, debía contar con una red Wi-Fi potente, dimensionada a las necesidades del centro y que permitiera utilizar los Chromebooks sin que sufrieran interrupciones de conexión o caídas constantes de la red, tal y como les venía ocurriendo con la instalación que tenían, que les generaba problemas de conexión y fallos de servicio a diario, dificultando la navegación en las aulas y obstaculizando el conseguir un rendimiento óptimo.
Por otro lado, necesitaban una solución que ofreciera seguridad Wi-Fi de confianza, robusta y escalable que, al mismo tiempo, permitiera una administración ágil, sencilla e integral de todos los dispositivos actuales y futuros, pues el proyecto, pasaba por realizar una primera implementación de 180 dispositivos Chromebook conectados a los servicios Google for Education – que a futuro, iría ampliándose paulatinamente al resto del colegio.
El aspecto de la seguridad también era crítico, pues era importante garantizar que los estudiantes no accedieran a contenidos inapropiados y evitar cualquier uso que produjera distracción o un uso inadecuado durante la utilización de los Chromebooks. No hay que olvidar el hecho de que se debían securizar las redes Wi-Fi existentes y todos los rangos de red procurando visibilidad y control sobre toda la instalación ampliada.
Todo esto hacía necesario implementar un Entorno Inalámbrico de Confianza que también permitiera combatir las 6 categorías de amenazas conocidas a las que se expone una red Wi-Fi mientras aportaba seguridad a la conexión del centro. Por si esto fuera poco, la escuela necesitaba tener todo listo y operativo en alrededor de un mes, aprovechando la inactividad del centro debido al período vacacional de los alumnos.
Índice de temas
Solución
Con un fuerte enfoque en proporcionar Wi-Fi seguro y rápido a sus alumnos y al equipo docente, el colegio cántabro confió en Soluciones Informáticas Personalizadas (SIP) para acometer este proyecto por su profundo conocimiento del mercado, su experiencia en la instalación de sistemas, redes y comunicaciones, así como por su demostrada solvencia técnica. SIP, que ya trabajaba en el área de mantenimiento TI con la escuela, entendió perfectamente lo que el centro necesitaba en esta nueva etapa.
Para ello, realizó una auditoría y dimensionamiento de las comunicaciones y optó por utilizar las soluciones de WatchGuard por su flexibilidad, y porque este fabricante estaba en condiciones de resolver la problemática de la escuela ajustándose a su presupuesto. Para ofrecer una red Wi-Fi segura que permitiera las conexiones rápidas y sin interrupciones que requerían el uso de los Chromebook, SIP desplegó un total de 6 puntos de acceso Wi-Fi WatchGuard AP325 habilitados con Secure Wi-Fi, garantizando así la protección de la red inalámbrica real, precisa y automatizada que el colegio estaba buscando.
“Gracias a la alianza tecnológica que WatchGuard mantiene con Google Chromebook, hemos conseguido que se facilite infinitamente la tarea de registro, gestión y sincronización de los equipos Chromebook, así como la protección del entorno Chromebook, pues todo se realiza de forma automática”, explica Óscar Prado,profesor y coordinador TIC del Colegio Esclavas SCJ de Santander, que subraya que la seguridad se ha visto reforzada. “De este modo, el centro garantiza una sólida política de seguridad para los estudiantes a través del entorno de los Chromebooks, hemos podido mejorar la interoperabilidad y facilitar la gestión, y la visibilidad de todo el tráfico web”.
Adicionalmente, para una mayor seguridad de red, SIP también instaló un firewall WatchGuard Firebox M670, de modo que el colegio se encuentra completamente protegido y debidamente equipado para hacer frente de forma segura, al uso de vídeo extensivo, por ejemplo, así como a la velocidad de conexión que requiere la escuela para impartir las clases. Con este firewall también se ejecutan en paralelo motores de análisis de seguridad sin que se generen cuellos de botella que afecten al rendimiento y dispone de visibilidad integral de la red, y todo con una gestión fácil de todos los dispositivos conectados. Adicionalmente, el Firebox M670 está equipado con una suite que brinda al colegio una amplia variedad de servicios de seguridad como control de aplicaciones, bloqueo web y de spam, antivirus para el gateway, IPS y defensa de reputación, entre otros, protegiendo 24×7 al centro del sofisticado panorama de ciberamenazas avanzadas actual al que se expone al apostar por la digitalización de las aulas.
Resultados
La combinación tecnológica de soluciones WatchGuard que ha realizado SIP ha hecho posible que los resultados de este proyecto hayan sido muy positivos para el centro. No hay que olvidar que, a medida que el uso de wireless se ha convertido en una necesidad para el mejor desempeño de su actividad, la escuela también se expone a mayores vulnerabilidades y riesgos, de ahí que la red Wi-Fi suministrada por WatchGuard y gestionada en cloud, haya aportado estabilidad y escalabilidad a la infraestructura de TI inalámbrica de la escuela, además de mejorar notablemente el nivel de seguridad de las conexiones.
“Estos requisitos eran condición sine qua non con la que se debía cumplir, pues hablamos de un entorno educativo en el que los estudiantes deben contar con las tecnologías más punteras para su formación, pero sin exponerse a los riesgos potenciales de Internet y sin que los activos y los datos del centro se vean afectados por un posible ataque, ya que estos, ahora, son bloqueados en tiempo real”,apunta Óscar Prado.
Esto ha sido posible gracias al despliegue de los AP325, unos puntos de acceso ideales para entornos de densidad media que incorporan tecnología 802.11 ac Wave 2 y MU-MIMO, y facilitan la conexión de varios dispositivos al mismo tiempo, ofreciendo un sistema sólido en lo que respecta a la conectividad inalámbrica.
Además, estos AP cuentan con WIPS habilitado, un sistema de prevención de intrusiones inalámbricas patentado que permite al colegio disponer de un rendimiento inalámbrico de alta calidad, al mismo tiempo que garantiza la aplicación de políticas de seguridad coherentes a través de todos los dispositivos conectados, asegurándose de que todos ellos están autorizados y pudiendo tomar contramedidas automáticamente frente a posibles intrusos. Y, por supuesto, esto facilita la detección y desactivación de ataques de forma automática protegiendo con total garantía todo el entorno del centro y las conexiones de los alumnos desde sus Chromebooks.
