IBM ha ganado 3.100 millones de dólares, 330 millones más que hace un año gracias a la magia del ahorro de costes, a la integración de sus negocios globales, de la adquisición de compañías de software y servicios rentables, y de la existencia de negocios commodity poco lucrativos.
No obstante, los ingresos del Gigante Azul han disminuido un 13 por ciento hasta los 23.250 millones de dólares debido al impacto de la fortaleza del dólar, ya que la compañía asegura que no de haberlo sufrido, la caída hubiera sido del siete por ciento. Los analistas esperaban que la facturación fuera de 23.590 millones, aunque en realidad este declive está en línea con otros grandes jugadores del sector TI.
Sin embargo, el indicador clave, el margen bruto, ha subido al 45,5 por ciento cuando antes era del 43,2 por ciento gracias al buen comportamiento de los negocios de servicios y software.
Geográficamente, el mayor mercado de IBM, las Américas, ha visto disminuir sus ventas un nueve por ciento, mientras que en Europa y Oriente Medio esta disminución ha sido del 20 por ciento, y en Asia del siete por ciento.
Por áreas de negocio, los ingresos por servicios han sufrido un declive del 12 por ciento debido a la caída de las ventas del diez por ciento de los servicios de TI que han sumado 9.110 millones de dólares, y a la caída del 15 por ciento de los servicios de negocio hasta los 4.340 millones. El área de software ha bajado su facturación un 7,3 por ciento sumando 5.170 millones de dólares. Pero sin duda, y como era de preveer ha sido la división de hardware la que se ha dado el batacazo con una caída del 26 por ciento de las ventas hasta los 3.850 millones.
IBM cree que puede aprovechar las oportunidades de crecimiento que surjan cuando la economía se recupere, por lo que ha revisado al alza sus previsiones para el total del año y para 2010 también. Por ejemplo, ahora espera unos resultados de 9,7 dólares por acción cuando antes lo había situado en 9,2 dólares; y que su negocio de software ascienda a los 8.000 millones de dólares.