Lores Serrano. Computing En un entorno de crisis generalizada, los resultados de Sage Group a nivel mundial presentan un ligero decrecimiento respecto al ejercicio anterior de 2008. En concreto, la compañía ha experimentado en sus ingresos totales un decrecimiento del cuatro por ciento hasta los 1.641 millones de euros frente a los 1.715 millones que obtuvo el año pasado. En cuanto al beneficio antes de impuestos, éste se ha situado en los 350 millones de euros, esto es un dos por ciento menos que en 2008, que fue de 359 millones.
Otros datos, -más positivos-, son que el Ebita antes de los costes de restructuración ha crecido un dos por ciento situándose en los 396 millones de euros; la cartera de clientes ha sumado los 6,1 millones, 245.000 más que en 2008; y el dividendo propuesto se ha incrementado en un tres por ciento hasta los 7,43 peniques por acción, frente a los 7,21 pagados el último año.
“La continua atención que hemos prestado a proporcionar una asistencia de la mejor calidad, una selección de productos desarrollados a escala local y opciones de pago flexibles para nuestros clientes ha hecho que la empresas continúen confiando en nosotros como socio de confianza, ayudándoles a gestionar sus empresas durante este empeoramiento de la situación económica, dato reflejado en los altos niveles de retención de los contratos de mantenimiento y en el crecimiento de los ingresos por nuevos clientes, que han ayudado a compensar el descenso que se ha producido en las licencias de software durante el año”,ha comentado al respecto Paul Walker, consejero delegado de Sage Group.
