Unisys ha presentado su apuesta más ambiciosa de los últimos tiempos: la herramienta Workspace as a Service (WaaS), que facilita una gestión completa del puesto de trabajo, permitiendo a las organizaciones tener entornos de trabajo flexibles en cualquier dispositivo, sincronizados perfectamente con las necesidades de cada usuario. Desde la evaluación y estrategia inicial hasta la migración a las operaciones diarias, Unisys WaaS va más allá de la virtualización para crear una transformación completa.
WaaS permite acceder a los sistemas corporativos de forma flexible y centrada en los usuarios, facilitando a su vez la centralización de la informática de usuario final, por lo que reduce costes y complejidad. Además, supone la virtualización del entorno de trabajo y de las aplicaciones, mejorando la disponibilidad y acelerando la entrega de nuevos servicios. Unisys Workspace as a Service es una solución integral para facilitar la transición de un entorno tradicional centrado en los dispositivos a un entorno preparado para el futuro, centrado en los usuarios. La solución se construye sobre la centralización de algunos o todos los componentes del escritorio al centro de datos, donde pueden combinarse para responder a los objetivos específicos de la organización y de los usuarios.
Además, tiene cuatro componentes: servicios de Consultoría, de transición e implementación, de gestión del escritorio y servicios de infraestructura de virtualización del escritorio. Estos servicios ayudarán a las organizaciones a definir funciones empresariales y diseñar la correspondiente estrategia de virtualización, construir la infraestructura, planificar y ejecutar la migración de usuarios, paquetes de aplicaciones o escritorios completos para su entrega a dispositivos múltiples y gestionar todo el entorno transformado desde la red hasta el soporte para el usuario final.
“Lo importante es que usamos la tecnología para cubrir las necesidades del usuario final, sin ser cautivos de ningún proveedor; porque al fin y al cabo, Unisys vende servicios, y no un producto”, señalan José Ramón Travé y Marcos Cotrina, responsables de Ventas para EMEA. Así las cosas, en España ya cuentan con algunos clientes de la solución, por ejemplo una importante compañía energética.
La implantación de WaaS, según reconocen los portavoces, puede ser algo lenta, ya que “no todas las compañías están lo suficientemente preparadas ni son todo lo maduras que deberían”. Por ese motivo, es necesario hacer una auditoría previa con el objetivo e analizar las metodologías y analizar dónde pueden comenzar los procesos de cambio. “Puede tardar hasta dos o tras años en notarse los beneficios, pero conlleva grandes ventajas para la productividad del usuario final y menores costes como consecuencia de la complejidad reducida, y a la centralización de suministro y soporte”, sentencia José Ramón Travé.