Según un estudio realizado por Frost&Sullivan, el próximo año el 75 por ciento del tráfico de voz se realizará bajo tecnología VoIP, debido, sobre todo, al ahorro de costes que conlleva y las funcionalidades que proporciona.
A pesar de ello, la mayoría de las empresas europeas desconfían del rendimiento de este servicio. Exactamente el 73 por ciento de las compañías, según un informe de Compuware, desconfían de la calidad y fiabilidad de este tipo de tecnología, factores, a su vez, que consideran fundamentales a la hora de elegir la transmisión de voz sobre tecnología IP.
A pesar de esa desconfianza, casi la mitad de las empresas no se preocupan por llevar a cabo una correcta implantación de este sistema antes de su puesta en marcha. Esto hace que no se tenga conocimiento de las repercusiones que pueda tener esta tecnología en la red y, por lo tanto, no se asegura la fiabilidad de la misma.
Además, los analistas afirman que es necesario que las empresas cambien la forma de monitorizar y gestionar el rendimiento de su infraestructura tecnológica. En este sentido, la monitorización de las llamadas IP de forma individual es fundamental para asegurar el correcto funcionamiento del sistema dentro de la red de la empresa, y tan sólo un ocho por ciento de las compañías lo hace.
Por el contrario, un llamativo 72 por ciento gestionan el uso global de la red, por lo que en la mayoría de los casos algunos errores pasan inadvertidos repercutiendo en la calidad del servicio.
El estudio concluye afirmando que la mayoría de los problemas se solucionan una vez ocurridos e, incluso, casi la mitad de los responsables TIC admite que, ante cualquier incidencia de la red, se limitan a dar más ancho de banda en vez conocer la causa del problema.
