Las ventas de teléfonos móviles cayeron, a escala mundial, a lo largo del segundo trimestre del año por primera vez. De acuerdo con un informe elaborado por Gartner Group, la comercialización de terminales cayó en aproximadamente 7 millones entre abril y junio en comparación con el periodo que transcurrió entre los meses de enero y marzo, cuando normalmente el primer trimestre del año suele ser ligeramente más bajo en ventas que el segundo. Entrando en cifras, el trabajo asegura si entre enero y marzo se vendieron 96,6 millones de terminales, en el trimestre posterior esta cifra decreció hasta situarse en 89,9 millones de equipos (6,7 millones de terminales menos).
Desde el punto de vista de Ben Wood, analista de Gartner, las ventas de terminales móviles en Europa occidental se han visto afectadas por el hecho de que operadoras tales como Vodafone, Orange o BT Cellnet no subsidiaron los terminales por tanto tiempo como en anteriores ocasiones y obtener beneficios de los nuevos clientes.
Por otra parte, el estudio asegura que el mercado está cerca de la saturación, al tiempo que pone de manifiesto que todavía existen usuarios que cambiarán sus actuales modelos por otros tecnológicamente más avanzados. La consultora pronostica que la irrupción de terminales GPRS a finales de año supondrá la consecución de unas ventas globales de 450 equipos en 2001 frente a los 400 vendidos en 2000.
Según los datos que manejan los analistas, hoy por hoy, el fabricante que se halla a la cabeza de este mercado es Nokia, con una cuota de participación en el mismo del 34,8 por ciento entre abril y junio de 2001. A continuación, se situaría Motorola con un 14,8 por ciento, seguido de la sueca Ericsson, con un 8,3 por ciento del total, Siemens con un 7,9 por ciento y Samsung con un 6,9 por ciento.
