Los trabajadores actualmente confían en la inteligencia artificial (IA) para realizar casi la mitad de sus tareas laborales, según un nuevo estudio de Salesforce para la que se ha encuestado a casi 6.000 personas de empresas de diversos tamaños y sectores en nueve países. Aunque se sienten más cómodos cuando la IA y los humanos trabajan juntos, también están empezando a confiar en esta tecnología para que realice, de forma autónoma, tareas que les ahorran tiempo, como escribir código, analizar datos para extraer información y redactar comunicaciones escritas.
Una encuesta de Bain & Company sobre IA generativa revela que prácticamente 9 de cada 10 empresas ya han implementado o están probando esta tecnología. Concretamente, la mayoría de estas empresas están realizando pilotos y experimentando principalmente con ChatGPT.
El gasto relacionado con la IA generativa también está aumentando. De media, las empresas están destinando aproximadamente cinco millones de dólares anuales a plataformas de IA generativa, cifra que asciende a 50 millones de dólares anuales para el 20% de las empresas más grandes.
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Los trabajadores y directivos creen en un futuro autónomo
Los líderes empresariales confían más en la IA que el resto de los empleados, ya que la utilizan para realizar el 51% de su trabajo, porcentaje que se reduce hasta el 40% en el caso de los trabajadores de base.
Los líderes empresariales afirman que utilizan la IA para el 51% de sus tareas, frente al 40% en el caso del resto de trabajadores
En la actualidad, los trabajadores ya confían en la IA para realizar aproximadamente el 43% de sus tareas laborales, lo que indica un cambio de percepción hacia la descarga de trabajo en herramientas de inteligencia artificial. Por otro lado, el 77% de los trabajadores de todo el mundo acabará confiando en la IA para que trabaje de forma autónoma. Esta cifra incluye al 10% de los que ya confían en la IA para operar de forma autónoma, al 26% que lo hará en menos de tres años y al 41% que da un plazo de tres o más años.
De media, las empresas tienen alrededor de 100 empleados que dedican parte de su tiempo a trabajar con IA generativa, mientras que en las grandes empresas esta cifra asciende a 240 empleados. Sin embargo, solo el 36% de los encuestados afirma tener una estrategia clara para implementar la IA en sus empresas.
Los trabajadores empiezan a confiar en que la IA se encargue sola de ciertas tareas
En la actualidad, el 54% de los trabajadores de todo el mundo confía en que los humanos y la IA realicen juntos la mayoría de las tareas laborales. Cuando se preguntó a estos trabajadores si confiaban en la IA para realizar algunas de estas mismas tareas de forma autónoma, la respuesta, para un pequeño grupo, fue “algunas”. Entre los cometidos con los que se sienten cómodos delegando completamente en la IA se incluyen: escribir código (15%), extraer información de datos (13%), desarrollar comunicaciones internas y externas (12%) y actuar como asistente personal (12%).
Solo el 36% de las empresas encuestadas cuenta con una estrategia clara para integrar la IA en sus negocios
Sin embargo, en opinión de los encuestados hay otras funciones que, por el momento, requieren la participación de un humano. De esta forma, los trabajadores son más propensos a confiar únicamente en los humanos para realizar tareas como ser inclusivos (47%), incorporar y formar al personal (46%) o proteger los datos y mantenerlos seguros (40%).
No obstante, según la consultora Bain & Company, IA generativa cumple o supera las expectativas de las empresas en el 75% de los casos. Cuando no se cumplen, los problemas más comunes se deben a la baja calidad de los resultados, dificultades con la adopción por parte de los usuarios o herramientas estándar que no aportaron el valor esperado, entre otros casos.
El 63% de los trabajadores opina que una mayor implicación humana aumentaría su confianza en la IA
Asimismo, más del 60% de las empresas encuestadas la consideran una de sus tres principales prioridades para este año y el próximo, y el 87% la sitúan entre sus cinco prioridades principales para los próximos tres o cuatro años.
La participación humana puede allanar el camino
El 63% de los empleados de todo el mundo afirma que una mayor implicación humana aumentaría su confianza en la IA. Además, la preocupación por el desarrollo de esta tecnología puede deberse a una falta de comprensión, ya que el 54% de los trabajadores afirma no saber cómo se implementa o gobierna la IA en su lugar de trabajo. En cambio, aquellos que dicen saberlo son cinco veces más propensos a afirmar que confiarán en que la IA funcione de forma autónoma en los próximos dos años.
La formación puede ser otra de las claves para confiar en la autonomía. Así, el 62% de los trabajadores asegura que disponer de más oportunidades de desarrollo de habilidades y formación aumentaría su confianza en la IA.
