Aunque la inteligencia artificial continúa revolucionando el marketing, es evidente que no todos corren a la misma velocidad. Un nuevo informe de SAS y Coleman Parkes, ‘Marketers and AI: Navigating New Depths’, revela que, aunque algo más de la mitad de los directores de marketing en España (51%) prevé invertir en agentes de IA durante el próximo año, solo un 21% se atreve a ponerlos a prueba en entornos reales. El resultado es una brecha cada vez más visible: las empresas que ya recogen beneficios tangibles y las que siguen mirando desde la grada cómo avanza el partido.
El informe se basa en una encuesta a 300 organizaciones de todo el mundo, desde pymes hasta empresas con más de 10,000 empleados, que operan en diversos sectores. Todos los encuestados son profesionales del marketing.
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Los profesionales del marketing empiezan a experimentar con agentes de IA
En la actualidad, los profesionales del marketing se dividen en tres grupos distintos según su grado de madurez: observadores, planificadores y adoptantes. Los planificadores tienen intención de utilizar la IA en el próximo año y los observadores, en los próximos dos años. Los adoptantes ya están utilizando agentes de IA, desplegando sistemas a gran escala y aumentando así la brecha de rendimiento.
El 51% de los directores de marketing en España prevé invertir en agentes de IA durante el próximo año, aunque solo un 21% se atreve a ponerlos a prueba en entornos reales
Entre los adoptantes, tres de cada cuatro aseguran estar aprovechando todo su potencial: el 63% ya la aplica a nivel empresarial, y de esos, el 42% la utiliza en todos sus canales de marketing para tomar decisiones en tiempo real. En cambio, entre los observadores únicamente el 7% afirma sacarle el máximo partido; solo el 25% la emplea en toda la organización y apenas un 1% la integra en todos sus canales.
La diferencia es tanto tecnológica como de mentalidad: solo el 3% de los observadores dice tener un conocimiento profundo de esta tecnología, frente al 61% de los adoptantes. La familiaridad genera confianza, y la confianza impulsa la innovación.
La confianza, un factor clave
Los adoptantes de agentes de IA ya están aplicando casos de uso avanzados, como agentes de aprendizaje continuo (47%) e informes de rendimiento (45%).
A pesar de su creciente adopción, la confianza en esta tecnología sigue siendo limitada. El 90% de los profesionales expresa cierto nivel de confianza, pero menos de 1 de cada 20 confía plenamente en ella. Aunque el 79% se siente “algo seguro” de la gobernanza de IA en su organización, muy pocos muestran una confianza total, lo que evidencia la necesidad de reforzar la supervisión a medida que aumenta la autonomía.
La irrupción de la computación cuántica
La madurez en AI no solo se mide por lo que se hace hoy, sino por cómo se planifica el futuro. Para muchos adoptantes, ese futuro incluye la computación cuántica: el 50% ya la ha incorporado en sus hojas de ruta digitales o de innovación frente al 25% de los observadores. Esto refleja el cambio de la mera observación a la planificación estratégica a largo plazo. Para ellos, la incorporación de agentes de IA no es un proyecto aislado, sino una plataforma de lanzamiento hacia una transformación más amplia.
