El mercado laboral ha evidenciado una transformación significativa de los perfiles TIC debido a la tecnología y la necesidad sin precedentes de la protección del medio ambiente en una era de globalización y digitalización. El Informe sobre el Futuro del Empleo 2023 del Foro Económico Mundial advierte que el 85% de las empresas adoptarán nuevas tecnologías para impulsar la transformación de su organización. Para los empresarios, un 44% de las competencias requeridas se verán alteradas en los próximos cinco años, por lo que les urge contar con más personal capacitado y actualizado.
Basándose en las últimas tendencias del mercado laboral, El Centro Oficial de FP CCC ha elaborado un listado con las ocho profesiones técnicas que serán las más requeridas este año.
1. Desarrollador de inteligencia artificial. Es una tecnología cada vez más presente en el día a día de las empresas, sea cual sea el sector al que pertenezcan. Aunque la automatización de procesos y la aplicación de la IA llevará a la destrucción de millones de puestos de trabajo, la necesidad de interactuar con esta nueva tecnología también generará oportunidades. De ahí que el técnico en automatización y robótica industrial y el experto en IA y big data serán perfiles muy demandados durante este año.
2. Especialistas en ciberseguridad. Amenazas, ataques y accesos no autorizados son factores que se encargarán de proteger estos profesionales. En plena digitalización, los conocimientos en administración de sistemas informáticos en red (ASIR) garantizan una alta empleabilidad. Si el futuro trabajador quiere ir más allá, ya existen másteres oficiales en Ciberseguridad en Entornos de las Tecnologías de la Información.
3. Analistas de datos. La información masiva es otra de las tendencias de esta época, por ello el manejo de datos resulta fundamental para el futuro desarrollo de las empresas. Y es que para tomar determinadas acciones y decisiones es clave tener un profesional capaz de gestionar toda la información con la que se cuenta. Para ello, escoger cualquier formación de informática y comunicaciones y decantarse por una posterior especialización en IA y big data, ayuda a los futuros analistas de datos a formarse en profundidad.
4. Desarrollador de software cuántico. Implementar lenguajes de programación cuántica, que van un paso más allá de la computación clásica, es otra de las garantías para encontrar trabajo en un futuro cercano. En ese sentido, la formación en desarrollo de aplicaciones mutiplataforma y web con especialidad en iniciación a la computación cuántica es un recurso de aprendizaje directo, rápido y completo para el desempeño de los puestos más técnicos.
5. Especialistas en realidad aumentada y virtual. La formación en animación 3D juegos y entornos interactivos ofrece buenos resultados para los desarrolladores de espacios virtuales. A medio camino entre el mundo digital y el físico, el diseño y desarrollo de experiencias interactivas a través de la tecnología es un campo de formación con previsiones de contratación al alza.
6. Especialista en smart home. La tecnología es una prolongación más de nuestra vida y se ha colado en las casas a través del llamado Internet de las Cosas. Formarse en instalaciones eléctricas y automáticas o en sistemas eléctricos y automatizados puede llevar a múltiples formas de empleo que tienen como tarea principal hacer que nuestros hogares sean lo más eficiente posible a través de soluciones personalizadas e inteligentes adaptadas a las necesidades de cada familia.
7. Especialista en ecommerce. La venta online lleva tiempo despuntando debido a la comodidad que ofrece hacer una compra en cualquier lugar y recibirla en tu propio domicilio. Cada vez son más los comercios que apuestan por esta modalidad de negocio. Por ello la formación en Marketing y Publicidad generará perfiles TIC cada vez más demandados por las empresas.
8. Especialista técnico en biomedicina. Invertir en la investigación es sinónimo de avances en el campo de la salud y la fuerza del sector sociosanitario es cada vez más evidente. Los perfiles TIC formados en Laboratorio Clínico y Biomédico presentan un perfil idóneo para aplicar las innovaciones que surjan en el campo biomédico con el objetivo de ofrecer tratamientos de calidad a los pacientes.
